Me acuerdo mis estúpidas sonrisas al escucharte.Porque por si no sabias yo si lo hacía
Yo si te escuchaba. Escuchaba casi mínimo sonido que saliera de tu boca.
Apreciaba cada acción que venga de tu cuerpo.
Te tenía en un altar de oro. Que después de tantos trofeos vacíos el altar se rompió
Eras como una droga. Mientras más te tenía más te necesitaba y más mal me hacías.