Viviendo Con Mi Primo(The Weeknd)

-1-

Valerie Pov

Desperté por la mañana.
Hoy era mi jodido cumpleaños.
Cumplía mis putos dieciocho años.
Me miré al espejo, amargada de la vida, bueno, de todo
Lo típico cuando te crías sin algo de disciplina, nadie te entiende.

Bajé al salón, viendo que mi madre se acercaba para abrazarme.
No me gustaban los abrazos, ni los besos.
Era muy fría, congelada diría yo.

-Felicidades... -Dijo corriendo hacia a mi-Hija...

Me senté sin ninguna expresión de felicidad en la mesa.
Cumplía dieciocho y me la sudaba.
Solo un año más vieja, un jodido año menos de vida.
Me presentaré.
Me llamo Valerie Makkonen Tesfaye, tengo dieciocho años recién cumplidos y soy una tía rebelde, vulgar y bla bla bla...
Vivo con mis padres en Canadá, en Montreal.
Mi padre es un tío gilipollas que se pasa el día haciendo el idiota, asi que mi madre tiene que hacer todo:trabaja, cocina y hace todas las tareas.
Se abrió la puerta.
Era mi padre, que habia ido a comprar drogas.
Si, era drogadicto.

Como dije antes, es dificil cuando uno se cria sin disciplina.

-Felicidades-Dijo dándome un beso.

-¡Quita! ¡Que asco!-Dije, limpiandome la mejilla.

-Valerie, hemos llamado a toda la familia para que venga a vernos.Comportate como es debido, eres ya adulta-Dijo mi madre.

Sí, soy adulta.
Pero me la suda lo que piensen los demás.
Al diablo la opinion de la gente.
Mi padre reía fumado, y entonces estos dos empezaron a discutir.
Yo, tranquilamente, me fui a mi habitación.

Los oía discutir.
Decían:¡Tu tienes la culpa de que sea así, no se que y no se cuanto!...
Asi es mi día a día.
Yo me drogaba desde los dieciséis pero me puso en rehabilitación mi madre, ya que no quería que pasase lo mismo que papá.
Ellos dos no saben que yo tengo novio, se llama Sean y es un tío de puta madre, el mejor que he conocido.
No he follado con el, sigo siendo virgen, el sabra cuando yo este preparada
Mis padres no aceptaban esa relacion para nada, decían que había rumores de que había sido infiel en todas sus relaciones pero no les creo.
Son dos putos locos

Me vestí presentable, o al menos lo intenté.
Odio que me digan lo que tengo que hacer.
Me pongo un top de camuflaje, un panty negro con rayas blancas a los lados y tacones.
Me hago las trenzas de boxeadora por mi largo cabello negro y al rato, salgo.
Oí tocar el timbre.
Abro y eran mis abuelos.
Entraron y siguió viniendo más gente, mis tíos y en fin, primos y primas.
Por última vez sonó el timbre y en ese momento, abrió mi madre.

-¡Abel! ¡Que alegría verte!-Dijo mi madre

-Igualmente-Dijo sacándose el casco de la cabeza.

-Hijo ¿que te has hecho en el pelo?-Oí decir a mi madre.

¿Que se había hecho?
Eso quería verlo.
Salí de la cocina y me adentré en el salón.

-Valerie-Dijo él-Que grande estas.

-Gracias-Dije, algo seca.

Yo odiaba a Abel, lo unico que no recuerdo el porqué.
El me miró raro y dijo:

-¿Pasa algo?

-No, nada-Dije.

Nos interrumpió mi madre.

-¡La tarta!-Dijo mi madre, poniéndola en la mesa.

La tarta era de chocolate y ponía mi nombre.
Tenía una vela que ponia 18.
Todo el mundo cantaba cumpleaños feliz, aunque yo misma me decia por dentro que nunca los eran.
Soplo la vela y aplauden.

Sigo sin ninguna expresión, nunca demostraba nada.
Esta era yo.