Constanza Florgue

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En mi adolescencia, siempre supe que la escritura era lo mio, la literatura es un arte muy complejo y simple a la vez, depende de cuanto quieras saber sobre la matéria, ¿verdad?
Al llegar a la universidad quise un reto, se necesitaba uno para un trabajo final: Escribir una redacción sobre un lugar poco conocido e impresionante, mínimo 30.000 palabras. Mi mamá me había contado del hospital donde nació mi abuelo Ronald, no parecía la gran cosa pero no tenía otra mejor idea para el trabajo así que lo ubiqué en un mapa y me tomé los trenes que necesitaba para ir allá (ademas de que caminé bastante).
Encontré el hospital en el centro de un bosque, se veía muy antiguo, me desilucioné bastante al pensar que seguramente ya estaba vacio. Pero al tocar el timbre me atendió un señor con un traje impecablemente blanco,
entré y examiné el lugar, era muy lindo y contrastaba mucho con su imagen exterior, muebles totalmente libres de manchas, cuadros de muy alto nivel y muchas personas.
Me dí cuenta que en los hospitales los sentimientos  son muy faciles de notar, la tristeza, la alegría, la tensión, en cada uno de los dormitorios de los pacientes.
Y eso era otra de las cosas en las que pensaba.
Los pacientes.
Había de todo tipo, el señor Glirf me guió por todo el lugar, me mostró casi todo, menos los baños, algunas puertas que decían "no entrar", pero sentí que algo no encajaba: Por fuera, se nota que el hospital tiene seis pisos, y el señor solo me mostró cinco.
No mencioné nada sobre el piso faltante, pero la curiosidad no me dejó pensar en otra cosa esa noche.
Salí del hospital y me tomé el primer tren de dos que necesitaba para llegar a mi casa,
En todo el recorrido solo pensaba en que ese lugar era el indicado para mi trabajo, prendí mi computadora para poder escribir sobre el particular hospital pero no pude teclear ni una palabra, mi trabajo tenía que ser especial desde la primera oración, algo que atrapara a mi profesora. Pero ¿que podría poner? Guardé el archivo con el nombre "trabajo: John Park" y apagué mi computadora.
Ahora tenía otro problema más: ¿Que podría hacer para poder quedarme en el hospital? No puedo tomarme dos trenes de ida y dos de vuelta todos los días, también tengo que estudiar para mis otras materias y ayudar a mi madre en la casa con mi hermano, además que tarde o temprano los que trabajan en el hospital me preguntarán que hago allí.
No puedo decirles que estoy investigando, primero que nada porque necesitaría el permiso del jefe del lugar y ni siquiera se quien es, y segundo es que el hospital es muy misterioso, llamenme exagerada pero tiene un piso de más del cual nadie habla, parece que esta sucio y abandonado pero la verdad es todo lo contrário, como si esa fuera su máscara, está hecho en el corazón del bosque y por última razón que la verdad no se cómo no la pensé antes:  No se nada sobre el doctor John Park, la verdad nunca escuche a nadie que lo nombrara.
Tuvo que haber sido alguien importante o no tendría un hospital con su nombre ¿verdad?

Me bajé del tren y esperé el siguiente, ya en mi casa saludé a mi madre y a mi hermano Daniel, él es mi mellizo, de pequeños eramos muy parecidos, ambos pelirrojos con toques morenos, piel tostada y ojos marron oscuro. Ahora somos muy distintos, él con sus rastas por toda su cabeza y su piel bastante mas tostada que de niños, yo conservé mi pelo lacio siempre atado en un rodete o en una cola alta.
Después de cenar un plato de arroz con ensalada me fuí a mi computadora a buscar quien fue el doctor John Park.
Quedé impactada
Leí la información varias veces, de distintas fuentes, hasta busqué nombres de libros para leer luego sobre el doctor, todos llegaban a lo mismo, pero eso no puede ser verdad.
¿Quién es el Dr John y qué son los  Enfal?

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⏰ Última actualización: Oct 21, 2016 ⏰

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