FNAFHS | Game of Balance | Freddy y Tú

Capítulo 1

CAPÍTULO 1: LO QUE EL ORDENADOR SE COMIÓ.

-Creo que me estoy volviendo loca- Me dije a mi misma mientras observaba la pantalla del ordenador.

Al parecer después de un maratón de episodios, algo raro le pasó a la máquina. Lo extraño es que nunca le había pasado algo así... Es más, es rara la manera en la que se descompuso. Acabo de ver a Fred, uno de los personajes, guiñarme un ojo, luego sentí como me agarraba la mano. Al sentir ese tacto, cerré él aparato, porque es imposible que ese sea verdadero... ¿cierto?

-¡Hija, has la cena!¿Crees que yo haré todo en esta casa?- Gritó mi "madre" desde su habitación.

-Claro, ya voy...- Dije con un poco de sarcasmo, luego susurré- Puta...

Y bueno, así era mi vida. Básicamente yo era la responsable de la casa, ya que mi madre estaba muy ocupada intentando conseguir un hombre que se quede con ella, o quejándose de lo poco "hombre" que fue mi padre biólogo y cuando nos abandonó.

Bajé las escaleras hasta el recibidor, abrí la puerta y antes de salir, mi madre me volvió a llamar:

-¡¿A dónde crees que vas!?

-Ahh... ¿A comprar comida?- Le respondí

-¿Y para que quieres hacer eso?

-Emm... ¿Para hacer la cena?- Le respondí, con sarcasmo.

-Ah, bueno... ¡Pero no te tardes que tienes que arreglar la ropa que voy a usar!

Lo positivo de la situación es que al parecer no notó el sarcasmo de mi frase. Así que, antes de que me pidiera otra cosa, cerré la puerta de entrada y empecé a caminar. Por suerte la tienda no quedaba muy lejos.

Cuando ya había conseguido la comida y regresado a casa, escuché unos extraños ruidos provenientes de mi habitación.

-¡___, que demonios estás haciendo en tu habitación! ¡Todavía tienes que preparar mi ropa!- Grito mi madre, histérica.

-¿Qué crees que estoy haciendo? ¡Tú me dijiste que hiciera la cena!-Le grité de regreso, más porque estaba en la planta alta que por el hecho de que abusara de mí.

-¡¿Y por qué tardas tanto?!- Me respondió de vuelta, en vez de agradecerme por hacer TODO en esta casa... Ahora que lo pienso, nunca me agradeció... ¿Qué clase de "madre" hace eso?

-¡Por que la comida es un POCO complicada!

-¿Qué harás de cena?

-Pasta- Le respondí cortante, se me estaba acabando la paciencia, como cada vez que venía un "amigo" o "conocido" a cenar.

-¡¿Pasta?! ¡Eso es comida para pobres!

En eso llegó un tío como 15 años más joven que mamá... Daba pinta de mujeriego.

-Oye, ¿a cuantas personas le has robado esa belleza que tienes, preciosa?

«¿Quién se cree este tipo?»

-___, ¿con quién estás hablando?- Dijo mi madre, mientras bajaba las escaleras- Oh, ya veo- Dijo con voz seductora cuando vio al hombre plantado en medio de la sala.

«Ahora que lo pienso... Que poca seguridad hay en esta casa...»

-¡___!- Me gritó mi madre- ¡Sube a tu habitación a ordenar algo! Los mayores tenemos cosas de que hablar...- Lo último casi hace que vomite en la alfombra.

Y con mucho gusto me fui de aquella espantosa escena. Al entrar en mi habitación, recordé el extraño comportamiento de Fred. De seguro fue mi imaginación.

Bueno, si mi madre estaba "ocupada", tenía toda la tarde, y tal vez la noche.

Cerré la puerta, me acerque a mi cama, y abrí mi portátil.

Una pantalla azul me sorprendió.

«¿Qué? ¡Pero si la acabo de comprar!»

La portátil luego empezó a producir ruidos extraños, no tan raros como los que hacia mi madre con él otro hombre desde el otro cuarto, pero aún eran extraños.

Me recordaba a los que hacía Freddy en la llamada telefónica del primer juego de Fnaf.

Lo siguiente que paso fue que la habitación empezó a desaparecer, dejando una luz, demasiado brillante, del mismo color que la pantalla del ordenador. Cerré los ojos en un intento inútil de protegerme de esa claridad.

Cuando abrí los ojos, me encontraba acostada sobre césped, bajo un árbol, que desde mi punto de vista, era inmenso.

«Joder, me duele la cara... Y estoy llena de babas...»

«Espera... ¿Qué es ese sonido? ¿Sera que...? ¿Morí?»

-Enséñame a hacer eso, maestro.

«¿Será...? ¡No, no puede ser!»

-¡Y-yo no s-soy tu maestro, s-solo te estoy ayudando! ¡D-déjame en paz!

Me volví hacia donde estaban las voces.

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¿Qué les parece el prólogo? ¡Nos ha resultado bastante divertido hacerlo! Pero bastante difícil ponerse de acuerdo... ¡Esperamos que les haya gustado! ¡Comenten y voten! :D