Mi profesora de ingles

Conociendo a Valerie (I)

Ajeno a la conversación entre mi madre y mi hermano terminé de desayunar. Tardé apenas unos minutos, quería volever lo antes posible a mi cuarto con la esperanza de ver de nuevo a esa chica y a ser posible, poder hablar con ella. Las ganas de conocerla me consumian, yo nunca me he relacionado con las chicas a decir verdad pero ella llamaba mi atención de una manera impresionante. Cogí mi plato y taza y dejé ambos objetos en el fregadero, a medio camino por las escaleras me detiene mi madre
M:Leo vístete y luego bajas otra vez que tienes que salir a comprar para la semana
Yo: Vale ahora bajo
Subí a mi cuarto y después de hacer mi cama me vestí con unos jeans negros, camiseta básica blanca, por encima de esta una chaqueta negra y unas convers blancas, finalmente me peiné un poco. Antes de bajar me asomé una última vez a la ventana pero no se les veía ni a ella ni a su madre, solo al hombre que llevaba gritando toda la mañana indicando al camión que podía irse.
M:Venga date prisa antes de que cierre la unica tienda abierta, toma aqui tienes todo lo neceseraio -dijo entregandome un pequeño trozo de papel uadriculado escrito por una sola cara-
P: Voy contigo -dijo cogiendo su chaqueta, en ese momento ví a través de la gran ventana al lado del sofá como se abría la puerta de enfrente y salía.....si salió ella, cargada con una pila de cajas superado su altura. Oportunidad perfecta para empezar una conversación y causar buena impresión-

Yo: Eh no, mejor que no. Siempre te distraes con algo y seguro que no llegamos a tiempo -dije abriendo la puerte y echando a Pablo hacia atrás-
P: Mentira!
Yo: Verdad -cruzandome de brazos y cortandole el paso a la callae a mi hermano-
M: Ya parad los dos! -dijo poniendose en medio de los dos evitando que Pablo se lanzara a "pegarme"(no tiene suficiente fuerza como para hacerme daño)- Venga Leo que te cierran. Pablo tú te quedas conmigo que hay cosas que hacer y me ayudas -dijo quitandole la chaqueta-

Salí de casa vicorioso. Por el camino iba buscando a la vecina con la mirada hasta que la encontré a pocos pasos de un cruce intentando reoger las cajas que se le habían caído. Aceleré el paso y pe ayudé cogiendo algunas cajas.

Yo: Ho-hola soy Leo, e-el vecino de enfrente -dije cogiendo la última caja que quedaba en el suelo-
X: Hola....yo Valeire....encantada -dijo enseñando una sonrisa que he de admitir, me quedé sin respiración (se que suena exagerado)

Entre palabra y palabra hacía pequeñas pausas, como si le costase y tenía un acento extraño. Estaba claro que no era de España.

Yo: No eres de por aquí, cierto? -ella se limitó a negar con la cabeza sin borrar esa sonrisa que despertaba las mariposas de mi estómago.