Capítulo 1

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Narra  Kora:

Hoy era lunes, por lo cual era mi primer día de clases así que me levante más temprano de lo habitual, ya que con los nervios no puede dormir mucho. Como me sobraba mucho tiempo decidí darme una larga ducha de agua caliente, y después de 30 minutos decidí salir de la ducha. 

Quería ir presentable así que me decidí por una camiseta corta rosa, con unos vaqueros ajustados azules y mis converses negras (mirar foto). Me trencé mi cabello y me dispuse a bajar a la cocina para tomar mi desayuno. Allí se encontraban mi madre y mi hermana, ya que como era de costumbre mi padre se fue temprano a trabajar.

-Buenos días hija.-Dijo mi madre nada más verme.- Ahora que estás aquí, quería decirte algo.

- ¡Buenos días mamá, buenos días enana!- Les dije mientras me sentaba en el taburete junto a mi hermana.- ¿Qué querías decirme? 

-Bueno, tu sabes como son nuestros trabajos, y ya se que nos mudamos para estar cerca de ellos, pero a tu padre y a mi nos a surgido un viaje a Estados Unidos de imprevisto, al cual debemos ir. Se que no será de tu agrado pero como hoy comenzarás tu nuevo curso no sería  bueno que vinieses con nosotros ya que perderías muchas clases, así que hemos decidido que te quedarás aquí sola en casa mientras realizamos el viaje. y si preguntabas... No, tranquila tu hermana vendrá con nosotros.- Soltó mi madre dejándome con la boca abierta. 

-¿QUÉ?- Dije al fin sin creerme nada.- Me dejareis sola, aquí, sin nadie quien me acompañe... ¿Y qué? ¿Por cuánto tiempo será? ¿Días? ¿Quizá semanas? ¿No será más verdad?

-Lo siento mi niña pero esta vez será por más, nos quedaremos un mes allá, pero no te preocupes que te dejaremos todo el dinero necesario, y si quieres podemos contratar una niñera para que no te sientes sola- Dijo mi madre

-NO.- Le respondí casi chillando.- ¿Acaso soy un bebé ahora como para que tengáis que contratar una niñera para que me cuide? Definitivamente no mamá, me quedaré sola. ¿Cuándo os iréis?

-Hoy por la tarde, cuando vuelvas de clase. Por cierto, ¿Nos acompañaras a despedirnos al aeropuerto?- Dijo ella levantándose para apartar sus platos del desayuno.

-Si, está bien-Dije.

Terminé de desayunar y volví a mi habitación a coger las cosas no sin antes echarle una mirada de desprecio a mi madre. Poco después llegó Abby junto con su madre, monté en su coche, no sin antes despedirme de mi madre, y nos fuimos rumbo a nuestro nuevo instituto.

Llegamos un poco pronto, ya que cuando entramos no había casi nadie. Caminamos un poco por los pasillos buscando donde se encontraban las clases a las que asistiremos y a la vez contándole a Abby todo lo que había pasado esta mañana antes de que ella llegará. Unos minutos más tarde entramos a nuestra clase y aún estaba vacía así que pudimos escoger el asiento que quisimos.

Pasaron las primeras horas, llenas de presentaciones de asignaturas, miradas hacia nosotras por ser las nuevas... Llegó la hora del descanso y como vimos que la cafetería estaba llena de personas hablando, comiendo, etc. Nos fuimos al patio debajo de la sombra de un árbol a comer. Estuvimos hablando de nuestras cosas, observando a todos los que caminaban cerca nuestras y a la vez hablando sobre como deberían de ser cada uno de los que mirábamos. Sin darnos cuenta, el descanso se pasó super rápido hasta incluso llegaríamos tarde a nuestras clases, ya que esta sería la primer a en todo el día que no teníamos juntas. Sin darle más vueltas, comenzamos a correr pero por mala suerte el profesor acababa de entrar.

-Mierda.- Pensé. Entré a clase haciendo una reverencia y disculpándome ante el profesor y todos mis compañeros que ya se encontraban sentados y callados mirando cada movimiento que yo hacía.

-Como eres nueva aquí por hoy te dejaré entrar, pero que sea la última vez que sucede ¿de acuerdo?- Dijo él.- 

-Si señor.- Dije sin levantar la cabeza.- Como solo quedaba un asiento libre, me dispuse a caminar hacia el con todas las miradas de los demás siguiéndome.

-Hola, ¿Te importa si me siento aquí? es que no quedan más sitios libres.- Le dije al chico que se encontraba al lado del asiento libre.

-Si, no te preocupes, puedes sentarte aquí. Por cierto, mi nombre es Kim Jongin, pero puedes decirme Kai, encantado.- Dijo él con una sonrisa en la cara.

-Yo soy Kora, encantada también.- Le respondí.

-¿No eres de aquí verdad?- me preguntó Kai mientras yo le negaba con la cabeza.- Pues pronuncias muy bien para no ser de aquí.

-Gracias.- Respondí riendo ante su comentario.- Llevo varios años ya viendo aquí por eso mi pronunciación.

Las últimas horas se pasaron así, ya que Kai se encontraba en todas las mismas clases que yo. Por fin tocó el timbre que significaba el fin de las clases. Me despedí de Kai y me fui a la puerta de salida para esperar a Abby la cual salía acompañada por un chico alto de pelo oscuro y con la piel un tanto pálida.

-Adiós, hasta mañana.- Le dijo Abby a aquel chico desconocido para mí.

Íbamos de camino a mi casa andando sin pronuncia palabra, pero esto ya se me iba haciendo incómodo ya que quería saber el porque de esa risa tonta que llevaba haciendo Abby desde que se despidió de ese chico.

-Y bueno,¿me vas a contar ya quién era ese chico o vas a seguir callada todo el rato?- Le solté de una vez.

-Se llama Chen, el es compañero de clases, y también comparte clases contigo. Me senté con el ya que como llegué tarde no había sitios libres. El es tan... ¿Cómo decirlo? TAN GUAPO QUE... AW NO SE NI COMO DESCRIBIR A LA PERFECCIÓN QUE ACABO DE CONOCER.- Dijo gritando por en medio de la calle. ¿Y tu qué tal? ¿Has conocido a alguien?

-Ya, no chilles exagerada, ya me dí cuenta de que era guapo y tal, pero tampoco era un dios caído del cielo ni nada parecido. Y respecto a que se he conocido a alguien... Si, se llama Kai, y bueno, la verdad es que es super simpático y me parece muy lindo.- Dije con cara de felicidad.

-Ya decía yo que estabas tardando en decir nada eeh.

Llegamos a mi casa y se despidió de mí. Entré y en la puerta se encontraban todas las maletas de mis padres y a hermana tirada en el suelo jugando con su móvil. Poco después, ya estábamos en el aeropuerto y yo estaba despidiéndome de mi familia la cual no vería en un mes.

-Adiós cariño, pórtate bien, estudia, no hagas tonterías, ni fiesta, nada de chicos en casa, no gastes todo el dinero de la tarjeta...- Comenzó a decir mi madre.

-Si, ya lo se mamá, tranquila que me portaré bien.- Dije interrumpiendo a mi madre.

-Bueno hija, lo dicho, pórtate bien, y no olvides que te queremos, te llamaremos todos los días para preguntarte como estás ¿Vale?- Dijo mi padre.

-Adiós papá, adiós mamá, adiós enana.- Dije despidiéndome de cada uno y dándole un fuerte abrazo.

El camino a casa se me hizo corto. Llegué a casa, le pagué al taxista que me trajo, y entré cerrando la puerta detrás de mi. Cené algo ligero ya que no tenía mucha hambre, hice mis deberes y caí rendida después de un eterno día. 



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  ¡Holaaa! Espero que os haya gustado el nuevo capítulo, comenten si os ha gustado.   










Quédate a mi lado (EXO & BTS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora