El móvil de Kiseop sonó alertándole de un mensaje entrante.
>>Y bien, ¿te animas?<<
Realmente intentó con toda su voluntad tratar de ignorar aquel mensaje, pero los recuerdos de sus experiencias anteriores se lo impidieron y sin pensarlo por más tiempo respondió.
>>Está bien, ¿a qué hora?<<
En menos de un minuto su celular volvió a timbrar y lo tomó para leer el mensaje.
>>Buen chico. En mi casa a las 8 pm. Te veo en la noche. Créeme... lo disfrutarás<<
Esas últimas palabras eran una promesa, una promesa que Jaeseop siempre se encargaba de cumplir.
Kiseop era un chico normal, con una vida normal hasta cierto punto. Claro, sin contar ese pequeño detalle.
Meses antes había conocido a Jaeseop en una fiesta, su amigo Kevin se lo había presentado y en el instante en que tocó la mano del contrario pudo sentir cómo una corriente eléctrica atravesaba enteramente su cuerpo. Cuando levantó la vista pudo observar en el rostro del mayor una bella sonrisa gatuna y notó cómo éste lo escaneaba de pies a cabeza con una mirada llena de deseo y lujuria.
Nadie le advirtió que aquel chico seria su perdición.
Kiseop realmente estaba enamorado de Jaeseop. Sin embargo, parecía que el otro simplemente lo buscaba por interés.
Una noche el mayor invitó al pelirrojo a su casa, y esa misma noche su vida cambió. Kiseop descubrió uno de los secretos del castaño. Un secreto que trajo buenas consecuencias para él.
Jaeseop disfrutaba el grabarse manteniendo relaciones sexuales.
Al principio Kiseop pensó que aquello era una locura. Sin embargo, su opinión cambió después de la primera prueba, y aunque sabía que había sido la mejor experiencia de su vida, le costaba un poco admitir que a él también empezaba a gustarle.
Como habían acordado Kiseop llegó a la puerta del departamento de Jaeseop a las ocho en punto. El pelirrojo se sentía ansioso por lo que le esperaba, y aún más porque el mayor le había prometido que lo disfrutaría.
Claro que siempre lo disfrutaba, pero era algo que Kiseop mantenía en silencio. Se negaba a aceptar que el castaño lo había arrastrado y lo había hecho caer en aquella perversión.
Como si su mano tuviera vida propia, se movió hacia el timbre y presionó el botón. En pocos segundos el dueño del departamento abrió la puerta, su preciosa sonrisa de gato apareció, e invito a pasar al pelirrojo –Bienvenido. Adelante por favor.
Jaeseop se hizo a un lado para dejar entrar al pelirrojo, el cual una vez dentro, cerró la puerta y se quitó los zapatos para luego entrar a la sala y mirar como el castaño preparaba la mesa de su comedor y ponía platos con comida para ambos.
-¿Tú... preparaste la cena?- preguntó Kiseop un poco sorprendido pues el mayor jamás había hecho algo como eso. Pensó que sería como las tantas otras veces... directo al sofá o a la habitación a hacer lo suyo.
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YOU'RE MY ADDICTION // 2Seop // AJ x Kiseop
FanfictionEl móvil de Kiseop sonó alertándole de un mensaje entrante... >>Y bien, ¿te animas?>Está bien. ¿A qué hora?<< Cred. Portada: @Happy-Virus_94