El-Sin-Nombre

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Hoy se cumplen 21 años de la muerte de la tía Hayley, mi madre Lilly, como cada año esta fecha en específico esta destrozada, sentada en el pequeño sillón individual con flores espantosas, en su habitación, con un marco de madera en su regazo, un marco que tiene una foto de ella mis tíos y la tía Hayley en un lago famoso de Escocia.

Puedo ver todo a través del espejo de mi baño mientras me cepillo el cabello, decidí fijar mi vista en otra cosa más deprimente que mi madre y su hermana muerta... Mi rostro por más que intentó que mi cabello deje de ser rebelde se aferra más y más. Seguí cepillando lo para que quedara en su lugar... Como era de esperarse... No lo hizo.

Parezco muerta aunque no lo estoy con mi piel tan pálida es un asco... Es como una hoja de papel y el cabello tan oscuro como los gatos de la mala suerte...

Si algo odio es mi cara.

Mis ojos bipolares que al sol son verdes y de repente son azules pero la mayoría del tiempo son mieles... Muchos pensaran que son hermosos... Pero no sirven de mucho ya que para estudiar necesito unos estúpidos lentes de abuela. Pellizco mis mejillas para que tomen algo de color haciéndolas escarlatas, intentó fallido... ¡Bien hecho Ev! Me rendí.

Entre a mi habitación color hueso... No es blanca. Es hueso. Color hueso. Abro el closet y saco el vestido negro dedicado especialmente para "El aniversario de la tía Hayley" mama odia que digamos "El aniversario de la muerte de la tía Hayley". Me pongo el vestido ya no me llega por debajo de las rodillas si no por encima de estas. Me coloque los zapatos de aguja negros a los cuales decidí nombrar los "zapatos de zorra" que me regalo la esposa número 4 de mi Papa. Obviamente lo hace para sobornar me. Aunque a mi padre le muestre lo contrario, no la dejara aparte ya esta algo viejo para la esposa número cinco pero nunca se sabe con el.

Me levanté y me acerque al espejo de cuerpo completo y me observe. parezco anorexica... Pero que se puede hacer mi mama nunca me deja tomar más de dos tazas de chocolate con malvaviscos y una dona... Pero bueno no son los mejores malvaviscos del mundo los que tomó aquí...

Tome mi abrigo negro y me lo puse... Es septiembre pero el otoño ya se esta acercando... Espera creo que ya es octubre. No si de hecho hoy es 10 de octubre el aniversario de la tía Hayley. El abrigo me queda un poco más largó que el vestido. No puedo agarrar mi gorro rosa de la suertero que mi madre hará que me lo quite. Finalmente me arme de valor. Salí de mi habitación y baje las escaleras.

Mi madre estaba cepillando los perfectos y dorados cabellos de mi hermana menos Natalie, mientras ella pedía a gritos un helado.

Si algo odiaba eran los gritos de mi hermana menor.

-Evangeline ¿lista para lo mismo de todos los años ? - escuche a mi hermano mayor Jason desde la cocina estaba sentado con los brazos cruzados y su sonrisa de ironía. Rodé los ojos.

-Jason es por mama... Ponte en su lugar, ¿qué harías si me sucediera algo como a la tía Hayley ?

El paso su brazo por mis hombros

- Tranquila Ev. Yo siempre estaré a tu lado protegiéndote ¡Siempre!- me beso la frente- vamos

Tengo al mejor hermano mayor del mundo aunque muchas veces no concordamos en ciertas cosas sonreí y fuimos hacia la sala aún con su brazo en mis hombros

-Ev ¿me comprarías un helado ? - dijo mi hermana menor fijando su vista con la mía arruinando el trabajo de mi madre, la cual solo reacciono con un bufido

-no se que haré contigo Natalie- dijo mi madre con un gruñido mi hermana jugaba con sus dedos viéndolos fijamente con los ojos con algo de brillo reí un poco y le conteste a la pequeña mar

Light up the skyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora