Odiame o Amame

Jade...

Después de aquél besó, Jade se paro y se despidió diciéndome.

Jade: Este no sera el último.

Y se fue, yo tome mi Skate y fui hasta mi casa otra vez, entre por la ventana y me acosté en la cama y me puse a pensar.

¿Porque lo hizo?

¿Que sintió Jade?

¿Que pensara Jade?

¿Todo sera como antes?

A la mañana siguiente fui a la escuela, y la primera hora de clase nos daba el maestro de filosofía, él me parecía un buen tipo y me había recomendado algunos libros muy interesantes.
Al comenzar la clase el maestro llamo a lista y llego mi nombre dije presente, y llego al de Jade y no contesto al ver al lugar donde estaba su asiento ella no estaba y me pregunte ¿Porque no vino a la escuela? A la hora de el almuerzo esperando que ella apareciera y no llego a la cafetería y no la vi en ninguna parte de la escuela, al terminar las clases me diriji a la casa de ella a ver que le había sucedido, llegué toque el timbre y salio su madre y le dije.

Yo: Buenas tardes señora Rachel.

Rachel: Hola James ¿como éstas?.

Yo: Bien y ¿como esta usted?.

Rachel: Muy bien gracias ¿vienes a ver a Jade?.

Yo: Si ¿Quería saber porque no fue a la escuela?.

Rachel: Bien esta en su habitación.

Yo: Muchas gracias.

Subí a el último piso la casa de Jade tenia tres pisos y el último piso era el de Jade, ella vivía cerca a la playa de la isla y su habitación tenia una hermosa vista, desde su amplia ventana podía ver el basto e inminente océano, su color azul mar profundo reflejado por el cielo, la arena de un tono amarillo pálido y se podían distinguir algunas conchas, era un paisaje perfecto, y podrá sonar cursi pero mis momentos favoritos para admirarlo son el atardecer y las noches de luna llena ambos por su reflejo en el mar, un día allí no estaría mal, y mas si es con Jade.

Al entrar a su habitación allí estaba ella acostada en la cama debajo de muchas cobijas se veía que estaba cómoda, ella voltio a verme y me dijo.

-Jade: Hola ¿Como éstas ?.

-Yo: Hola, Pues si hoy no a verte visto y haber estado todo el día extrañándote eso te parece bien pues estoy mal muy mal.

-Jade: Hay me extrañaste mucho mi pequeño idiota?.

-Yo: No me digas idiota a menos de que seas mi novia y estemos discutiendo o que seas mi madre.

-Jade: Podría ser tú novia pero no me gustaría lidiar contigo, y ser tú madre no gracias me volverías loca.

-Yo: Sí fueras mi novia, haría hasta lo imposible para que hoy seas más feliz que ayer y menos que mañana, a cada segundo te miraría a los ojos y te diría lo mucho que te amo, te lo diría todo el día, todos los días, también haría lo posible para sorprenderte cada día con algo nuevo, sí estuviera en mis manos me convertiría en tu ángel guardián para estar en todo momento contigo, y evitar que te pase algo, evitar que llores o sufras. Quiero ver siempre en tu cara tu hermosa sonrisa y el brillo en tus ojos, sí fueras mi novia te amaría por siempre, y así no seas mi novia siempre te amare.

Ella me veía como si estuviera estudiando mi cara, me veía de arriba hacia abajo y me veía a los ojos, mientras yo miraba sus ojos ese verde que me hacia sentir en un campó donde me hacia sentir mucha paz, y sus labios que me provocaban morderlos y hacer que su rostro se acercara al mio lentamente mientras la tomaba en mis brazos y ella me aruñaba la espalda muy lento y muy fuerte, veía como su cuerpo temblaba y sus pupilas se dilataban.