Ya No Habra Una Próxima Vez

Ya no habra proxima vez...

Sasuke corría emocionado por toda la casa buscando a su hermano mayor, con tan solo cinco años Sasuke parecía muy serio ante los niños de su edad, solo habían dos excepciones su familia y su nuevo mejor amigo.

—Hermano ¿Dónde estas? —Murmuraba el pelinegro.

Buscaba con mucha determinación hasta que...

—¡Te encontré! —Festejo Sasuke encontrando a su hermano mayor en el comedor de su casa con una montaña de libros acompañándolo.

—¿Qué sucede hermanito? —Contesto Itachi sin dejar de leer su libro de historia.

—¿Puedes mañana ir conmigo a mi colegio? —Así es, él pequeño Sasuke esta en el primer año de kinder y como lo normal de un grupo estudiantil de niños hacen reuniones familiares para que los parientes no se pierdan de esta fase tan importante de los niños.

—Lo siento hermanito, tengo examen mañana —O al menos eso intenta el colegio.

—Pero hermano, padre y madre no pueden ir tampoco, no quiero ir solo.

—Te lo prometo, será para la próxima vez. —Itachi expendio su mano y le dio un toque con sus dedos en la frente.

Ya había pasado su examen de historia y ahora solo esperaría su nota, aunque sabiendo todo lo que se esforzó sabia que la nota seria satisfactoria.

Entró a su casa y se extraño al no ver a su hermano corriendo a recibirlo, así que decidió ir a la planta alta de su casa y ver que estaba haciendo.

Se sorprendió de lo que vio, su hermano estaba sonriendo muy alegremente mientras abrazaba a dos peluches muy particulares; uno era de una niña de pelo rosa y ojos jade con un vestido rojo y blanco; el segundo que según su perspectiva era con el que su hermano veía con ilusión era un peluche de un niño rubio, de ojos azules y lo mas llamativo unas marcas en las mejillas estaba vestido de color naranja.

—Sasuke, ¿Qué tienes allí? —pregunto Itachi.

—Hermano, mira estos peluches los hicieron mis amigos y me los regalaron.

—¿A si? Y dime ¿A qué se debió el detalle de tus amigos? —Le hacia muy feliz el hecho que su hermano se haya divertido y que tenga amigos, hasta ahora no había contado nada sobre algún niño o niña, se notaba lo feliz que estaba Sasuke ante la idea de la amistad.

—Es que teníamos que hacer un peluche de ti mismo a quien trajimos al colegio, pero Sakura dice que sus padres la hacen pasar pena, así que no les dijo y estuvo sola; también Naruto esta solo, pero el esta solo porque dice que no tiene papás, y su padrino esta trabajando, así que los tres nos juntamos y jugamos todo el día, Naruto y Sakura hicieron estos peluches para mi, yo también les hice uno a cada uno, y Sakura también le regalo a Naruto.

Nunca había escuchado hablar tanto a Sasuke pero le agradaba eso, aunque le entristecía ese niño rubio, tal vez Sasuke no entendía muy bien lo de la ausencia de los padres del niño, de eso tendría otro día que hacérselo entender para que no llegue a lastimar a su nuevo amigo.

—Pues que bien Sasuke y sígueme contando sobre ellos.

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Itachi ya tenia diecisiete años, por lo que su padre decidió empezar a darle responsabilidades en la empresa, con un empleo de medio tiempo como mensajero y en ese momento no podía estar mas que incomodo.

—Itachi, lo prometiste. —Reclamaba su adorado hermano.

—Se que prometí ir a ver tu presentación de patinaje sobre hielo, pero no tenia ni idea que padre me iba a poner a trabajar medio tiempo desde ahora. —La vida era de lo mas injusta, a sus ocho años su hermano siempre sufría a causa de sus obligaciones.