¡Que difícil es conseguir un autobús a esta hora! Rayos, llegaré tarde, como siempre.
Debo estar en el parque a las 10:00 pm por un asunto muy importante -según Phoebe, la dueña y jefa del lugar- y son exactamente las 10:10, me matarán de seguro. Que mamá me diera permiso de salir a esta hora fue difícil, ya que dice que debo cuidarme y salir a estas horas es malo para la salud, además de recalcar que pasó más tiempo en este parque que en casa y con ella.
¡Al fin! El autobús está llegando, espero y no me deje porque siempre pasa lo... ¡No otra vez! El desgraciado vehículo siempre me deja, tendré que irme caminando con este frío.
Mientras voy caminando por las calles, me fijo a mi alrededor y observo a la gente que pasa apresurada y que sólo se concentra en su mundo, en una pequeña niña que busca recolectar flores, dos personas que chocan y sólo se miran mal para seguir su camino...
Me gusta observar a la gente, creo que es interesante ver como actuan y darse cuenta de como cada una es un mundo distinto. Recuerdo que desde pequeña he sido así de distraída y toda un desastre, que me gustaba analizar todo lo que sucedía, pintar, bailar...-¡Oh, cuanto lo siento!
Cantar, ver las estrellas... Un momento, ¿Alguien me ha hablado verdad?
Veo con curiosidad al chico en frente mío, parece arrepentido de algo pero yo no tengo la menor idea de qué.
-Descuida, aunque no sé muy bien la causa de tus disculpas...-Dirige su mirada a mi jardinera y yo hago lo mismo. Oh, hay una gran mancha de pintura en mi y al parecer proviene de la pintura que posee en la mano. ¿Como puedo ser tan descuidada y no fijarme por dónde camino? Ahora si que me matarán en casa-. Dios, no sé como no me di cuenta antes, estoy frita, peor que un huevo, van a darme sentencia de muerte.
-Yo de verdad lo siento, tampoco me di cuenta- el misterioso chico hace una mueca y me mira con arrepentimiento.
-¿Tu pintura se ha arruinado?
-Un poco, pero no importa, se puede arreglar.
-Puedo ayudarte a repararla, digo, si quieres.
-¿Pintas?-Un brillo se instaló en sus ojos.
-Por supuesto, desde pequeña.
-Pues entonces puedes ayudarme si quieres-Una sonrisa se hace presente en él.
Recorcholis, que bonita sonrisa.
Concentrada, Noah, no te desvíes.
-¡Con gusto! Podemos hacerlo ahora o nos podemos juntar o... Espera, ni si quiera sabes mi nombre y ya quiero que nos juntemos, que tonta, perdón... -Comienzo a sentir vergüenza de no poder quedarme callada ninguna maldita vez en mi vida cuando recuerdo que debo llegar al parque y que probablemente estén todos enojados conmigo ahora-. ¡Perdón otra vez! Debo ir urgente a un lugar y se me había olvidado, creo que no podré ayudarte, Piper se enojará conmigo y Phoebe me gritará y Jake se decepcionará y mi madre me castigará y...
-¿Phoebe? ¿Jake? ¿Piper? ¿Vas a el parque 26, verdad?
-Sí, deben estar esperando por mi, lo siento.
-¡Espera! Yo iba justo hacia ese lugar, Phoebe me ha llamado también.
Oh, eso es realmente extraño, nunca había visto a ese chico por ahí.
-Podemos ir juntos, si quieres.
-¡Claro! Pero jamás había notado tu presencia en el 26, que extraño.
-Si... Lo que pasa es que es que llegué hace poco a la ciudad, Phoebe es mi tía y quiere que comienze a recurrir más el parque.
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26
Teen FictionUna amante de los libros, la música, la vida y pensar sobre todo. Con una ligera obsesión con bandas. Un poco de mal carácter, pero eso no importa ahora. Un amante del arte, el baile, la música, alguien que disfruta la vida, pero que guarda secretos.