Aléjate de mis sueños

Capitulo 1 -Tu

"¡basta por favor!" le supliqué al extraño que sostenía mi cuello con sus ásperas manos
"¡me vas a matar!" Le volví a reprochar mientras mi cuerpo chocaba violentamente con el agua de la tina, mis mejillas yacían húmedas por la desesperación que aquella situación me proporcionaba.

¿cómo pude ser tan tonta para dejar mis ventanas abiertas a disposición de cualquiera?

"Por favor" sollocé "haré lo que quieras, sólo no me lastimes mas"

El sujeto pareció entenderme y quitó su agarre de mi cuello

"Nos vemos en otra pesadilla linda" me dijo con una sonrisa burlona

¿Pesadilla?

Desperté sobresaltada en mi cama con unos golpes retumbando en mis oídos por la puerta.

"Eh adelante" dije reaccionando a los golpes

"¿Estas bien?" Escuche a mi mama decirme mientras se apoyaba a lado mío en mi cama

"Yo... Si, no te preocupes" le respondí aún pensando en aquellos ojos grises y la tan peculiar melena de rizos negros, en su rostro completo, cuyos labios tenían un aro color plateado atravesándolo por la parte inferior derecha.

"¿Segura? ¿qué ha pasado?" escuche a mi madre "me has preocupado bastante, ¡mírate! Iré por algunos pañuelos para secarte esa cara"menciono viéndome con ojos maternales.

Fue ahí cuando reaccione al verme en el espejo; mi cara yacía empapada por lágrimas y mi nariz estaba de color rojo al igual que mis mejillas, sin mencionar mi respiración agitada.

Me levanté de mi cama y me encamine al espejo, mire mi cuello sorprendiéndome al ver unos dedos marcados alrededor de este. Tapé mi boca con cierto horror retrocediendo de mi reflejo.

No, no, no, ¡no! ¡Era un sueño! ¡yo lo se!

"¿Estas segura de haber despertado?" Volteé esperando ver a mi madre pero lo que vi fue al desconocido que trataba de matarme

"Tu" escupí las palabras con cierto enojo y miedo.

"Tranquila, no te haré daño Keerer"

"Solo... aléjate de mis sueños" dije mirando su asombrosos ojos grises

"Eso depende de ti, tu me has soñado y apareceré en ellos cuando tu subconsciente lo ordene; ten cuidado Keerer, apareceré en tus pesadillas, trata de no soñar feo" me respondió guiñandome un ojo para después desaparecer en una bruma.