¿Siempre juntos?

Capítulo 1.

Vic se encontraba en su pupitre, sentado en una de las últimas filas, escuchando música con sus auriculares y mirando algo que, desde el otro lado de la ventana, llamaba su atención. Estaba en clases de inglés, aunque eso realmente no le importaba, quería salir afuera y relajarse un poco, la noche anterior no había podido dormir. La clase de 'Miss Finnegan' (como ella pidió que la llamasen) le aburría un poco.

Sonó la campana que indicaba el fin de la clase, sin apuro Vic tomo sus cosas y fue a la cafetería por un poco de café para despabilarse un poco. Luego se dirigió al patio y se sentó cerca de un árbol, abrió su mochila y saco su laptop.

-Hey, ¡hola! –él saludo con mucho entusiasmo a la persona del otro lado de la pantalla, extrañaba tanto esa sonrisa-.

-Hola, Vic, ¿cómo va todo? –él abrió la boca para responder pero la cerro rápidamente, no sabía que responder. La otra persona suspiro, sonaba como si hubiera contenido la respiración todo ese tiempo, luego observo detenidamente sin pronunciar alguna palabra, él se preguntaba si tenía una especie de visión rayos x o algo así porque siempre se daba cuenta cuando algo no iba del todo bien- . Prometiste que ibas a estar bien, que ibas a hacer amigos, que ibas a olvidar todo...Vic, lo prometiste.

-Lo sé, pero no es fácil, no es fácil esto y menos sin ti, Jenna. –ésta rio con ternura-.

-Yo también te extraño. Hable con mi mamá y en unas semanas voy a visitarte, mientras tanto tendremos que conformarnos con hablar vía Skype...

Él y Jenna eran mejores amigos.

Se conocieron en primer año de secundaria, Jenna se acercó a él porque le parecía lindo, cuando se lo confeso a Vic, éste le dio la espalda confesándole su homosexualidad y hecho correr a su casa. Al otro día, la rubia se sentó junto a él haciéndole saber que su sexualidad no le importaba, y desde ese día se volvieron inseparables.

Jenna siempre sabía qué decir o hacer cuando pasaba algo con Vic, y para él era difícil estar tan lejos de ella.

Ya era de mañana y Vic se levantó de buen humor, en parte se lo debía a Jenna (hablar con ella siempre lo ponía así) y además ya era viernes, por lo tanto al otro día no tendría que regresar al instituto.

Ya vestido bajo rápidamente las escaleras y fue hasta la cocina donde se encontraban su madre y su hermano preparando el desayuno. "I'm a lonely boy, I'm a lonely boy. Oh, I got a love that keeps me waiting..." Vic cantaba alegremente, tomo a su madre por la cintura y comenzó a bailar torpemente.

La señora Jenkins  y Mike (quien se atraganto con el cereal) intercambiaron miradas divertidas.

-Esto...cariño.- hablaba la señora con un tono dulce-. ¿Te encuentras feliz por algo en especial? –su hijo mayor se encoje de hombros mientras le da otro bocado a su tostada-.

-A Jenna le dieron permiso para venir a vernos en unas semanas. –cogió su mochila colgándosela en el hombro. Se inclinó para besar la mejilla de su madre y salió por la puerta principal junto con su hermano-.

Estaba en clases de biología. Hasta el momento, el profesor Rzeznik era uno de los pocos profesores que le agradaban.

-... Los grupos deben estar integrados solamente por dos miembros. Cada grupo va a realizar un proyecto desarrollando el tema que se les otorgue, así nadie se copiara de nadie. Y no, ustedes no van a escoger a su compañero. Este año tenemos muchos alumnos nuevos y la idea es integrar a todos. Llamare por lista y les diré con quién les toco. –Vic estaba nervioso, no conocía a nadie y no era bueno entablando conversaciones-. "... Lanza, a ti te toca con Drew. Y por último... Jenkins, a usted le toca con Brown. –"¿Quién era Brown?" se preguntaba, observo detenidamente a cada una de las personas que se encontraban en el salón, ¿era un chico o una chica?, ¿cómo se iba a acercar a hablarle?-. Bien, antes de retirarse pasen por mi escritorio junto con su compañero para poder asignarles el tema del trabajo.

Estaba guardando sus cosas en el casillero cuando alguien golpea suavemente su hombro, por un momento se paralizo creyendo estar en su antigua escuela donde los golpes "accidentales" sucedían diariamente. Lentamente se da vuelta, pestañea varias veces, un chico delgado, de tez blanca con el cabello negro algo crecido (el cual le tapaba un ojo) se encontraba enfrente suyo.

-Hola.- dijo con voz ronca y luego se aclara la garganta-. ¿Eres Vícent Jenkins? –el mencionado se preguntaba cómo es que sabía su nombre, ¿acaso era un admirador? Vic se golpeó mentalmente por pensar eso.

-Eh... esto... Si, pero me dicen Vic, ¿y tú? –el pelinegro sonrió divertido-.

-Soy Franklin, Franklin Brown.

Vic y Franklin fueron a la cafetería mientras conversaban animadamente. Quedaron en reunirse después del instituto en la casa del pelinegro.

Vic.

Estoy sentado en cama de Franklin. Él esta abajo, su madre lo llamo para que buscase algo.

La señora Brown es muy agradable aunque me intimido un poco al llegar, me abrazo y dijo algo como que estaba emocionada de por fin conocer un amigo de "Frankie", como ella lo llamaba.

-Eh... -Franklin había entrado al cuarto con un plato de galletas recién horneadas en las manos. Él estaba algo sonrojado, quizá era por los labios que tenía marcados con labial en la mejilla.- ¿Quieres? –Pregunto acercando el plato a mi rostro-. Mamá creyó que tendríamos hambre y...

-Gracias. –lo interrumpo y tomo algunas del plato, comienzo a engullir lo más rápido que puedo. Al alzar la mirada me encuentro con los ojos de Kellin, los cuales están abiertos como platos, observándome-. Lo siento, en la cafetería no había nada que me gustara. –siento mis mejillas arder levemente, para disimular abro la mochila y saco mi carpeta.- ¿empezamos?

Nos llevó poco tiempo terminar el trabajo y usamos el tiempo que nos quedaba para conocernos más.

-... la amo, fue una mujer valiente, independiente. Definitivamente nació en el siglo equivocado.

-¿En serio leíste Jane Ayre? Creí que nunca iba a encontrar...- me interrumpió el sonido de mi celular.

"Llamada entrante" era Mike, ¿qué querrá?