II

12 0 0
                                    

Cuando termine de leer la carta mi corazón se subió al cuello. Tenia ganas de conocerlo pero no encontraba el momento. Pensaba en mandarle una carta para que nos juntemos un fin de semana pero me acorde de que mi hermano va al campamento y tenia que acompañarlo.
Le envié otra carta:

Tomas:
Espero que estés muy bien. Yo pensaba en reunirnos el fin de semana, pero me acorde que mi hermano tiene el campamento y yo lo tengo que acompañar. Lo lamento mucho, yo quería conocerte. Para el otro fin de semana.

Besos:
Carolina

Yo tenía la esperanza de que un día lo podría ver...

Una semana después...

Esperé mucho, la pasamos muy bien en el campamento de mi hermanito. Nos divertimos mucho, ahora es hora de seguir con mi sueño que es conocer a Tomas. Nuevamente, le envié otra carta:

Tomas:
Buen día. Espero que estés bien. Fui al campamento y estuvo muy bueno. Hace mucho tiempo que no hablamos y te quería preguntar si me puedes enviar una foto tuya para verte. Creo que ya somos amigos desde un principio.

Abrazo:
Carolina

Esperaba su respuesta hace 2 semanas y nada. Es más, en un momento pensé que le había pasado algo, estaba preocupada. Hasta que 2 días después de que le envié la carta, me contestó.

Carolina:
Perdón por no contestar, es que tenía que cuidar a mi abuela que estaba enferma. Si, te voy a mandar una foto mía, pero luego me mandas una tuya. Si, estoy feliz de ser tu amigo.

Besos:
Tomas

La CartaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora