Secuestro

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"Hoy, 31 de octubre. Ema Thompson es una víctima más de los secuestros en estas últimas semanas"

Ver esa noticia en todos los canales dolía, Mi hermana, vaya a saber quien la secuestro.

No podía vivir sin mi pequeña, ¿Y si nunca la vuelvo a ver? Su cabello de oro y sus ojos de cristal llenan a mi ser por completo.

-Hijo, tranquilo la encontraremos. La policía..

-¿Piensas que la policía la buscará? Por dios padre eres tan crédulo. La buscaran en estas horas, pero pasadas las 72 hs la búsqueda se hará más lenta y en una semana ya se olvidarán del caso.

-Dices tonterías Drago.

-Lamento informarte padre pero mi tontería es cierta, o te olvidas lo de Thomas.

-Thomas era pobre, nosotros somos ricos.

-¿Y por ser pobre merece que no lo busquen? Thomas era mi mejor amigo y ahora nadie sabe donde esta. La policía es una mierda. Sabes me voy a mi cuarto.

Me tiré en la cama, y las lágrimas no tardaron en salir. Duele recordar el día en que Thomas se fue. Desapareció luego de una pelea en Moon y se lo llevaron.
Y de ella ni hablar ¿Quién la pudo secuestrar? ¿Quién es? ¿Quién fue? ¿Quién pudo ser tan cruel?

¿Por qué me hacen esto?

Tomé mi campera y me fui a caminar, el cielo estaba nublado y los rayos se hacían cada vez más grandes.

-Siento lo de tu hermana - dijo una chica pobre sentada en el medio de la calle.

Sólo le Sonreí.

-Se que estas triste, en serio lo siento mucho.

-Tu no hiciste nada, no es tu culpa.

Ella puso una expresión triste.

-Es verdad, yo...

-Deja de hablarme, si mis padres me vieran me matarían.

-No les molestaba que estuvieses con Thomas - se llevó las manos a la boca .

-¿Qué sabes de él? - dije yendo hacia ella.

-Yo,Yo.

-¡Vera, la cena! - gritó una mujer desde la ventana de una casa echa pedazos.

-Debo irme.

-No, dime qué sabes de él.

-¡Ven ahora Vera!

-Lo siento.

(...)

-

-¡Sientate! ¡Eres una inútil Vera!

-Madre, yo...

-¡Calla, eres idiota, no haces nada bien! ¡Debí abortar cuando el médico me dijo tu problema!

Vera fue a su habitación y se encerró allí. No era su culpa haber nacido así.

Fue al espejo y se miró, allí yacía una joven sin amigos, sin gracia, sin nada.

Se quitó sus audífonos y los guardó. Así es, ella es sorda. No del todo, escucha pero del 1 al 10 ella escucha un 4.

Se quitaba los audífonos cada vez que no quería escuchar a su madre. Muy seguido si se puede decir.

Finalmente, se acostó en el frío y polvoriento colchón y durmió mientras algunas lágrimas recorrían sus mejillas.