Vampiro

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-entonces como te encuentras?, sientes que las pastillas hacen efecto?- carlisle cullen estaba revisando mis pupilas
-funcionan pero me hacen sentir cansada
-es normal- carlisle guardó su lámpara en su bata y fue hasta su escritorio y comenzó a escribir en la computadora, tocaron la puerta y Edward cullen entró
-papá te traje los papeles que me pediste- Edward le dio una carpeta y carlisle la tomo, como si hubiera escuchado mis pensamientos Edward agregó
-son tus estudios de sangre, tienes muy bajas las defensas
-más vitaminas?- mire a carlisle sus ojos me miraron y dijo
-no será necesario, estas bien, sigue tomando tus pastillas tal como te dije, bien?
-bien- suspire y tomé mis cosas
-Si hay problemas con las pastillas ven de inmediato
-bien- suspire- gracias doctor cullen- subí mi mano para despedirme, por unos instantes carlisle miró a Edward y luego a mi, tomo mi mano y la estrecho, sentí la piel fría quemar contra mi piel, tibia y en menos de un segundo esta se enfrió, dio un apretón fuerte y retiro su mano, camine unos pasos cuando una voz me llamó, al voltear me encontré con Edward
-como estas?
"Mal"
-bien, todo esta llendo bien, que tal tu?- el sonrio
-bien, comiste algo ya?
-No, además sería cena, ya está anochesiendo, pensaba ir a casa y dormir todo el dia
-vamos a comer algo te invito
-no podía Edward...
-vamos, será divertido
-con una condición- espero a que hablara- que ambos paguemos
-me parece bien, conduces tu?
-por supuesto, vamos a hoja de te?
-como tú quieras- se encaminó al auto, quite la alarma y subimos...

El café hoja de te, es un lugar muy tranquilo donde se puede ir a leer, tener una conversación o con buena suerte conocer a alguien, la camarera se quedo embobada al mirar a Edward y nos guió a la mesa, nos entregó la carta y se fue, directamente mire las bebidas y postres, la camarera regresó, Edward no pidió nada y yo pedí un te helado
-seguro que no quieres nada?- la camarera miró a Edward, el me miraba fijamente
-estoy bien gracias- le sonrió, ella se sonrojo
-lo que quieras estoy a tu disposición- ignorandone completamente, después de unos minutos, el seguía mirándome fijamente
-entonces, ya conosiste a los licantropos- murmuró, casi me atragantó
-que?
-yo se, que tu sabes, lo que los quileutes son
-n-no se de que hablas- trate de hablar firme pero mi voz me engaño y tartamudee
-vamos puedes confiar en mi- me miró directamente a los ojos, tenía sus ojos como la sangre, oscuros y sin alma, sin pensarlo demasiado susurre
-vampiro...
Edward tenso su mandibula y tragó saliva, sus ojos se abrieron un poco más dejándome ver unos ojos desolados y sin amor alguno, pensé en huir, pero después me traqulice
-te podía matar en este momento- murmuró
-no lo harás- dije con valentía y tomé sus manos con mi mano derecha, senti su piel fria quemarcontra mi tacto, tenía miedo, si, pero algo me decía que el no me haría daño
-podría matar a todos en el restaurante sin dejar testigos- sus palabras me dieron escalofríos y sentí mi corazón latir al máximo
-no eres un asesino
-como lo sabes?- dijo amenazadoramente mostrando un poco sus colmillos
-por que detrás de esos oscuros ojos se que existe alguien diferente
El suaviso su rostro y movio sus ojos a los lados, había dado en el clavo
-crei que los lobos y los vampiros existían en las leyendas y historias de terror
-entonces aceptas lo que los quileutes son?
-Si, por que eres su enemigo natural, como no me di cuenta antes!?
-pasamos muy desapercibidos, nadie habla con nosotros
-yo habló con tigo, yo hablaré con tigo
-tu novio no lo aceptaría
-ya no es mi novio
-como lo sabes?
-es complicado
-bueno- suspiro- algo me dice que estarán juntos cuanto antes...

Iba a contestarle cuando mi teléfono sono, colgué sin ver quien era
-eres alguna clase de psíquico?
-deecho yo leo mentes
-me estas de broma cierto?
-no- miró a otra mesa- aquel tipo de halla- lo señaló con la cabeza, el hombre se veía como de unos 30 o más- esta nervioso por que tiene miedo de que su mujer descubra que la esta engañando con su secretaría, la cual esta en este momento caminando hacía el- mire de nuevo a la mesa, una mujer rubia de unos 20 y algo llegó a esta y se sentó, mire a Edward estupefacta
-como lo haces?
Abrió la boca para hablar pero mi celular sono de nuevo, sin ver colgué la llamada
-Guardaras el secreto?- se inclinó un poco hacia mi
-claro que lo haré...
Mi celular sono de nuevo y frustada contesté
-QUE!?
-______?- la voz de Quil gritó al otro lado de el teléfono, la música que sonaba de fondo no me hacía entender las palabras de Quil
-que?, quil?, Hola!?
Después de un rato la música se calló y escuché mejor a Quil
-____!, perdón por molestarte pero necesito ayuda, es embry...
Mi cuerpo se helo y miles de cosas seme vinieron a la mente
-que tiene el?
-esta muy borracho y no puedo llevarlo a casa, pregunta por ti y dice que no se irá hasta verte
-Quil yo...
-Hey Quil!!- la voz de embry sono al otro lado de la línea, me derreti internamente, amaba su voz...
-las chicas están solas y necesitan compañía!- dijo arrastrando las palabras
-ya voy embry
-con quien hablas?, con tu madre?!, No se preo vamos a divertirnos!
con sólo pensar que embry estaría con una chica que no fuera yo me dolía y me ponía celosa, hable sin pensar
-en que lugar están?...

The Beast Inside Of MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora