Capítulo 3

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Observo cada rincón de la gran casa de su compañera, era grande y perfecta, siempre había soñado con una casa así para su madre.

- ¿Andy? -

Lo miro de arriba a bajó seguía siendo un estúpido niño rico que podía restregar sus cosas en la cara de el, lo odiaba lo detestaba demasiado.

- michael - murmuro frío y seco.

- ¿qué hace aquí este Megan?- lo ignoro dirigiéndose a ella.

Bufó frustrada...-Haremos un trabajo Mich - farfullo

Se acerco a ella para después besarle los labios...- como sea, me voy cariño te veo mañana - susurro en sus labios.

Asintió y sonrió mostrando sus blancos y perfectos dientes.

- no sabía que aún seguías con el estúpido de Michael - Exclamo Andy

Frunció el ceño, era su novio y odiada que lo tacharan de idiota.

- no es estúpido y si aún es mi novio -

- creí que habían terminado -

- ¿cómo sabes eso? -

- como no saberlo Megan, el es el mariscal de campo y a parte tu eres una de esas populares -

Se encogió de hombros - así tiene que ser supongo -

- supones mal, pero que te digo tu eres así una materialista -

Negó con la cabeza, no quería sentarse a llorar frente a el, debía ser la chica fuerte de siempre.

- ¿así crees que soy? -

El asintió...- si Megan así eres y creo que no solo yo lo creo -

Encogió sus hombros...- no me interesa como me vean los demás soy como soy y ya -

- pienso igual que tu, soy como soy - sonrió

- como sea. Tu y yo somos muy diferentes, creo que no pensamos igual -

- tienes razón somos muy diferentes en muchas cosas -

- como sea Andy - se encogió de hombros.

Camino por el gran pasillo siguiéndola. Miro por esa puerta abierta, había un piano un piano blanco.

- ¡ANDY CAMINA! - gruño al verlo detenerse.

Dio un pequeño salto al escuchar la voz de su rubia compañera. Camino a paso rápido hasta ella.

- ¿y tus padres Megan? - murmuro curioso.

Se detuvo en seco para si poder voltear a verlo...- ¿te importa? - gruño.

Se encogió de hombros.
- supongo que no -

Revoleo los ojos y siguió su camino. Se sentía nerviosa, jamás había podido imaginar que ella pudiera mantener más de cinco palabras sin estar insultándose, no era una materialista como el solía decirle, sólo aparentaba lo que no era. Si tenía dinero y de todo pero no era la chica perfecta que todo mundo conocía a Megan Hastings no era la verdadera.

Se sentó sobre el sillón color azul que sus padres habían comprado en su último viaje de "familia" en Francia.

- ¿no piensas sentarte? -

- claro Megan que cortes - sonrió burlón

- yo si lo soy Andy-

- yo también rubia solo que contigo simplemente no me va eso de ser cortes -

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⏰ Última actualización: Nov 16, 2016 ⏰

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