Tony

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—Capitán paleta, ¿me estas escuchando? —refunfuñó la voz de Tony por el taller, mientras Steve dejaba el lápiz de un lado y alzaba la vista. —Te estoy hablando desde hace veinte minutos

—Lo siento Tony... —La voz de Steve resuena apenas mientras le sonríe— ¿Qué me decías?

Tony suspiro cruzándose de brazos y negando apenas con la cabeza. Su mirada paso de Steve al suelo dejando caer sus brazos a sus costados mientras caminaba nuevamente por la sala del taller que estaba algo revuelta entre proyectos que en algún momento había comenzado y otros que tenía planeado, mirando las herramientas que eran suyas, pasando las yemas apenas de los dedos en ellas y viendo por el rabillo del ojo a Steve quien le atravesaba con aquella mirada

—El reporte de tus misiones llegó hace veinte minutos —acotó girándose para verle de frente—Fury está ansioso por tu siguiente misión—y alzó una de sus cejas con burla reflejada en sus facciones— Y dice que seguramente estas ansioso de volver a llenar uno de esos—Steve negó casi gruñendo, no quería ni necesitaba más papeleo, Tony guardó silencio unos momentos antes de volver a hablar—Natasha llamó.

Steve abrió los ojos de repente, tragando duro.

Sintió el palpitar de su corazón en sus oídos, decidido a que, si este explotaba seguramente lo haría en su cabeza, sintió la boca seca de repente y un ligero temblor en sus manos las cuales se juntaron. Resopló duramente mientras bajaba la mirada hacia el suelo de la poca iluminada habitación, tragó duramente antes de levantar la mirada azul hacia la nada. Si Tony lo hubiese visto en esos momentos seguramente hubiese visto la mirada de suplica que Capitán América le estaba dando, una que, rogaba que no fuese nada terrible, una que, pedía a gritos la respuesta a una pregunta que no había dicho aun, una que rezaba a todo lo conocido y por conocer que, no escuchara las fatídicas palabras.

Apenas escuchó a Stark decir que, cuando Natasha había llamado él estaba tomando la siesta en el sofá del taller y que no quería molestarle por que se veía demasiado cansado después de aquella misión a la que había acudido, y en la que había participado Tony como Iron Man

La batalla.

Aquella fatídica misión en la que se habían encontrando y el había regañado enteramente a Tony por lo que había hecho. Tony se había defendido antes de que el dijese que necesitarían hablar de su mal comportamiento cuando llegasen a Nueva York.

Los recuerdos de ella estaban comenzando a llegarle a su mente, agolpándose unos contra otros, la lucha, la voz femenina hablando de algo que no logro escuchar ni entender por completo antes de aquel momento, Friday advirtiendo de algo en su intercomunicador, sacando un porcentaje de algo antes de ver color rojo.

—Murió. Lo lamento— la voz de Tony llegó hasta sus oídos dentro de ese mar de memorias que se agolpaban rápidamente y que no lo dejaban pensar con claridad— Lo lamento Steve si hay algo que pueda hacer por ti...

Pero Steve había quedado en blanco.

Había quedado estático mirando los zapatos del contrario por sobre el suelo, sintiendo el temblor de sus manos y piernas en un silencio pesado que había caído en el y en la habitación, que hacia que Steve no se sintiese cómodo, de repente se sentía sin ánimos, sin fuerzas para cualquier cosa. Sintió el rostro caliente, las mandíbulas apretadas y las ganas de destrozar cada mínima cosa en aquel taller, pero seguramente si lo hacía Tony se molestaría. Sintió a Dumm-e golpeando suavemente su brazo derecho con aquel brazo mecánico que tenia tendiéndole torpemente un pañuelo con unas siglas grabadas.

¿Había comenzado a llorar de la nada? No era llanto por frustración, el no estaba frustrado. Había perdido a la única persona que realmente le complementaba, había perdido a la persona que, a pesar de su carácter exótico le aceptaba como amigo y compañero, aquel que había prometido pasar lo que le restaba de vida con él.

TONY「STONY FANFIC 」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora