|Una celosa Revelación| [HoneyMustard] [+One-Shot+]

º*º* Capítulo Único*º*º*

El día comenzaba, y eso se denotaba en los colores anaranjados que se fundían en el exterior, pero también era sabido por el subterráneo, en donde habitaban criaturas totalmente fuera de lo normal que habían sido encerradas tras una ardua batalla. Cada Ser se encontraba haciendo su quehacer respectivo, abriendo sus tiendas, ordenando los libros, etc... Y este curioso mundo era llamado como "UnderSwap".

Si bien nos alejamos tanto de especificar las cosas, solo para no irnos del tema. En ese peculiar universo, la mayoría eran cordiales, convivían perfectamente, pero entre los tanto había uno que básicamente no procedía por esos ámbitos.

Un Esqueleto de estatura baja y tonalidades negras además de rojas, bastante góticas se debería mencionar, rondaba por la ciudad de Snowdin, digamos que no era su primera vez en ese sitio, hace cuanto ya había ingresado a tal locación, era algo difícil de recordar sinceramente, pero no era relevante.

Tal varón siempre había mantenido esa personalidad tan ruda, y grosera, aunque en este momento iba con aquella tenue sonrisa en el rostro que era acompañada de uno que otro magullón. Después de todo él había emergido de la denominada Línea como "Underfell", donde la regla de "KILL OR BE KILLED" era completamente aplicada, por lo tanto no era nuevo ver como esos monstruos se mataban mutuamente sin ningún respeto. Siempre había polvo volando.

Si bien regresamos al ahora, él iba con un propósito, buscaba a quien era apodado como "Stretch o Chimenea" y para ser más concreto era Papyrus, ese sujeto de perezosa actitud de la cual era regañado constantemente; pero... ¿Por qué? Ambo habían tenido una sutil atracción, si es que saben a qué me refiero.

Con ligeros saltitos entremedio de su caminar, se encaminaba a la casa de los hermanos la que era de pie a cabeza igual a la suya, a diferencia de que ésta se encontraba impecable, y sin ningún maldito orificio en las paredes.

Ni si quiera estando cerca de la posible residencia, encontró una imagen que lo impacto, algo que verdaderamente dejo a su entera persona estupefacta pero no de manera perturbada, solo algo... Adolorido. Estaba frente a sus cuencas las cuales denominaba como "ojos", la situación tan melosa de "Su copia" y aquel del hoddie Naranja.

Como siempre ha sido, ambos mostraban una hermosa relación, siendo fraterna o no, ya que era sencillo de confundir con cada actuar. Eso incomodaba abiertamente a Sans, que parecía apretar sus puños. Digamos que aquel masculino si había sentido cosas, y bueno, seguían persistiendo sobre sí. Cuan Hijo de perra iba a ser para poder disimular esa mierda.

Soltó un suspiro tosco, mientras daba unas maldiciones a lo bajo y empezaba a descender su rostro, los únicos murmullos que articulo fueron: -¿Cómo ganarle a eso...? –, antes de partir a correr de vuelta a donde pertenecía.

Ciertamente había exagerado un poco las cosas, ¡Pero estábamos tratando con un bastardo que a duras penas conocía lo que era llamado como "amor"! y no habló del acrónimo de violencia, Sino de ese "Amor".

Yéndonos a otro punto, ubicándonos sobre Paps, que parecía abrazar a gusto a su "Berry" de pómulos azulinos que perfectamente correspondía, por su inexistente "rabillo del ojo" presencio lo que vendría a ser una silueta familiar, a la que atino a mirar. Solo alcanzo a ver ese abrigo opaco ir cortando el aire como una bala.

— Sansy luego te veo... — Murmuró, mientras daba una última muestra de afecto a la "mora".

Sin más se fue alejando con pasos marcados, mientras que el de la pañoleta celeste mostraba un rostro preocupado. ¿Qué había sucedido en ese efímero periodo?

El de alías Cherry, atravesó la barrera de aquellos mundos con gran rapidez mientras lentamente se iban convirtiendo aquellos huecos visuales en cañerías, sus pasos fueron bastante marcados en las capas níveas y fácilmente se podía determinar que se arrimaban a su hogar.