Capítulo 7

489 33 0
                                        

Sam's POV:

¡Dios! ¿Por qué es tan egoísta con nosotras? ¡Cree que ella está al mando y nos puede manipular a todas! ¿Por qué mejor no evita ser así? 

Ahora estoy sentada tras un arbusto, abrazando mis piernas. De repente se me viene a la cabeza el tema por el cual peleamos. ¡Chloe! Dios no... Todo es culpa mía. 

Ya mismo iré a buscar a las chicas. No importa que estemos peleadas. 

¿Dónde estás exactamente, Chloe?

Kathe's POV:

¿Por qué es tan terca? Siempre fue así, desde niña. Todavía me acuerdo de nuestra niñez... Diablos. ¿Por qué peleamos? Extraño a Chloe, ella siempre nos tranquiliza en éstas situaciones.

No entiendo como pudimos pelearnos en un momento así. No puedo pelear con ella. No hoy, no ahora.

Voy corriendo hacia donde nos peleamos, y ahí esta, detrás de un arbusto, poniéndose de pie. Sin decir nada corro a abrazarla, y eso basta para arreglar todo, sin una palabra. 

  —Okey, eso fue lindo. Pero todavía hay que buscar a Chloe.—— dice Sam poniendo las manos en mi hombro y en el de Lucy.

¿Dónde estás, Chloe?

Chloe's POV: 

Veo mucha sangre alrededor mío, todo mi cuerpo duele y mis ojos me pesan. Y de un momento a otro, no soporto más mi cuerpo. 

Lucy's POV:

  —Chicas, ¿que hacemos?.—— les pregunto.

  —No lo sé, Lucy.—— dice Sam, ajena a lo que acabo de preguntarle. 

Sin cuestionar nada más, me acerco a un señor que le está dando de comer a las palomas

—Buenos días, señor.—— Éste me mira y me sonríe amablemente. —Necesitaría saber dónde se encuentra la calle Wesley. 

Larga una risa. 

—¿Calle? Es un pueblo a 200 km. de aquí.—— al oír eso mi corazón se acelera y me siento al lado del amable ancianito. 

—Disculpe, es que hace como una semana que desapareció mi amiga y alguien me dijo que está en Wesley. Pero resulta que no es una calle.—— digo llorando. —Lo siento, no debía contarle cosas personales.——    agrego mientras me levanto del banco y me voy dónde las chicas, secando mis lágrimas.

Sam's POV:


Luego de hablar con Lucy y calmarla un poco, nos quedamos pensando cómo podríamos ir hasta Wesley sin un puto auto. Giro mi cabeza y hay un auto fácil de abrir. Yo conozco éste tipo de cerraduras, no es la primera vez que robo uno.

Codeo a Kathe para que me ayude con los cables. Me mira y ojeo el auto. Ella me entiende y lentamente caminamos hacia el coche. Sólo a nosotras se nos ocurre robar un coche en plena avenida. 

La ventanilla del auto está medio abierta así que introduzco mi mano y destrabo la puerta. Entramos  todas, sacamos algunas partes, conectamos algunos cables y, como era de esperarse, arranca. 

Dejo que Kathe suba adelante ya que es la mayor y la única que sabe manejar. 

Cuando ya llevamos 20 m. de viejae, veo una persona en un auto que no para de mirarnos, no quiere pasarnos, y tampoco quiere perdernos de vista. 

MacylorineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora