Los sabores, distintos momentos (D.Gray-man)

Agridulce

Agridulce, agridulce era el sabor combinado entre ambas lenguas que danzaban en la boca del otro. El agrio sabor de aquella estúpida discusión que habían tenido hace ya una semana culpa del estres que ambos traían de sus respectivos trabajos, las inseguridades de si eran lo suficientemente buenos para el otro y el cansancio que acarreaban nublando sus mentes. El dulce sabor de la reconciliación que tanto habían esperado, el cariño que le tenían al otro despejando toda duda que tuvieran, pero sobretodo, el amor que rebozaban ambos al demostrarlo con todas esas caricias apasionadas que compartían diciendo todo lo que las palabras no eran capaz de expresar en su totalidad.

Agridulces, agridulces lagrimas cayendo ligeramente de los ojos plateados. Agrias lagrimas del estrés que era liberado en aquel instante, dulces lagrimas de felicidad aliviándolo, una combinación de liberación que le hacia feliz mientras una sonrisa ligera se formaba en sus labios cuando juntaron sus frentes a tomar aire, una mano se coloco en la mejilla del albino que limpiaba las lagrimas.

Agridulce, agridulce nudo que se formo en la garganta del pelirrojo al haber mantenido aquellas palabras atascadas en su garganta mientras otras palabras mas fieras y agrias habían tomado su lugar por aquella ultima semana, pero ya no, parecía que al mismo tiempo que el albino dejaba caer lagrimas con facilidad, el ojiesmeralda se deshacía de aquel nudo pudiendo liberar las dulces palabras de amor susurradas suavemente hacía el otro como si del secreto mas preciado del mundo se tratara pues para ambos aquellos instantes mágicos lo eran todo aún si habían tormentas que afrontar.

Agridulce, agridulce recuerdo de aquellos días pasados que ahora solo eran mas que un borroso recuerdo de sentimientos que se dejaba atrás al compas de los pasos de Lavi que cargaba a Allen en sus brazos hasta la cama en mitad de un millón de besos cortos. Los sentimientos de ansiedad y tristeza desaparecían al igual que la ropa lo hacía del cuerpo de ambos hombres, sustituidos por dulces caricias y suaves gemidos de placer que inundaban de sensaciones sus mentes, sensaciones eléctricas que recorrían sus cuerpos al tacto del otro y sus corazones repletos de felicidad pues estaban juntos compartiendo el mismo sentimiento en su momento más íntimo.

Agridulces, agridulces sentimientos combinados, pero la pasión iba ganando terreno sobre todo aquello que les había estado preocupando antes, ahora solo era momento de dejarse llevar al igual que las manos de Allen recorrían el torso desnudo de su amante mientras los labios de este dejaban un camino de besos en su cuello haciendolo de una forma lenta, tortuoso para el otro que repentinamente le dio la vuelta al otro para quedar encima, una sonrisa por parte del de parche, una mirada fugaz y una beso lento pero apasionado.

Agridulces, agridulces eran los movimientos que hacía el albino encima de la entrepierna del pelirrojo torturándolo del placer, lentos pero con suficiente fricción para hacer temblar a ambos por ganas de mas contacto. El brazo de Lavi intentaba alcanzar la mesita de noche por el bote de lubricante para preparar al otro, a pesar de los movimientos repentinos y feroces que a veces la exitacion les causaba hacer no querían arruinar el momento apresurándolo todo en una simple sesión de sexo duro y rápido, querían tomarse su tiempo en demostrar lo mucho que se habían extrañado el uno al otro, disfrutar del momento, lo que querían era hacer el amor demostrando el amor que se tenían el uno al otro demostrando así la culminación total de aquella regañina sanando sus heridas juntos en ese momento de compartir.

Agridulces, agridulces eran las sensaciones que invadían el cuerpo del inglés al sentir como los dedos de su amante entraban en el estrechando su pequeña entrada impaciente. Agrio era el dolor que se presentaba al sentir aquella invasión pero poco a poco el dulce placer recorría su cuerpo deleitándolo con aquellas descargas eléctricas, los suaves gemidos inundaban la habitación sin pudor alguno, el joven albino daba algunos ligeros movimientos de cadera alertando al otro que ya estaba listo a lo cuál el Bookman solo pudo sonreír dándole un suave beso en los labios y así cambiar a una posición mas comoda para ambos.

Agridulces, agridulces sacudidas por parte del más bajo que aún habiendo sido preparado el proceso de entrada era aún algo doloroso para el lo que hizo que su amante fuera despacio repartiéndole besos por toda la cara, susurrando palabras tranquilizadoras. Sus manos sé juntaron, sus ojos se miraron mutuamente, un ligero movimiento de cabeza afirmando el que podían continuar, una expresión avergonzada pero feliz, una expresión de alivió y ternura, sentimientos y sonidos recorriendo la habitación entera, una noche entera en vela donde lo único que contaba era el amarse entre si.

Pues agridulce podía ser la vida en una de su tan amplia gama de sabores, aún así ellos dos sabían que fuera el sabor que fuera, el momento o incluso la vida pasada o presente en la que vivieran, si su amor perduraba no había nada imposible para ellos y seguirían hacía adelante,siempre que fuera posible juntos o por el otro.

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Comentarios de autor~

El último capítulo de esta serie de oneshots Laven, para ser totalmente sinceros, no tenía ningun plan con esta serie, simplemente quería escribir algo relacionado con los sabores y distintos escenarios que sé relacionen a esos sabores aún si no parezca que estén muy relacionados entre sí. En cuanto a este último capítulo quería cambiar un poco y poner la escena de la cama porque después de una riña creo que la reconciliación sería mas como una forma de expresar con sus propios cuerpos cuánto se aman aque solo sea puro sexo si no una forma mas para demostrar sus sentimientos.

Muchas gracias a aquellos que leyeron este humilde fanfic, me alegra que mis simples locuras puedan gustar a otros.