prisionero de un deseo

lineas de tiempo 3 y 4

– kyubey nos esta engañando – dijo yuya con preocupación en su voz

El junto con Yuzu, Yuto y el nuevo salvador . . . Yugo, se encontraban en una fábrica

– de que estas hablando, que ganaría kyubey con engañarnos?– pregunto yugo

– . . . Pues . . . 

– de seguro estas con ese Yuri, tratas de que nos enfrentemos

– ¡ no es así! – dijo yuya 

– . . . El único que quiere que nos enfrentemos eres tu yugo –  dijo Yuto defendiendo a yuya 

– no defiendas al señor explosiones . . . no estoy muy seguro de pelear junto a el, yo estoy en el frente y no me siento seguro con esas explosiones sorpresivas en mi rostro 

Yuzu decidió entrar en la conversación – todos tranquilos, sakaki-san no tienes otras armas 

Yuya guardo un largo silencio – . . . pensare en algo
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El día siguiente llego y en la estación de policía el tiempo se detuvo 

Yuya estaba frente a los casilleros de los agentes, dentro había armas, cajas con municiones entre otras cosas

Yuya tomaba las armas y las metía en su escudo
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La gema de yugo se había corrompido y transformado el cuerpo de este en una maldición, la enorme armadura peleaba contra el pequeño grupo 

– ¿qué rayos eres?, ¿qué le hiciste a yugo?!! – grito Yuri esquivando los ataques de la maldición 

– yugo detente!!, recuerda quien eres!!, se que nuca quisiste herir a nadie!! – grito Yuto intentado que la maldición recordara quien era en realidad 

Yuto cayo ante un ataque y una avalancha de engranes iba hacia el

Yuya corría en su dirección, su escudo se activó y saco una pistola para desviar los engranes

– lo siento . . . Synchro-san . . . – dijo yuya mientras colocaba bombas alrededor de la maldición 

Las bombas explotaron y la estación del metro volvió a la normalidad

– Yuri . . . Demonios . . . ¿ cómo pudo suceder esto?— Dijo Yuri golpeando un bote de basura 

Yuto cayo de rodillas y comenzó a llorar

Yuya veía la escena con tristeza en su rostro, si tan sólo lo hubieran escuchado nada de eso hubiera pasado

Su tristeza se cambió por sorpresa cuando unos listones salieron del suelo y lo sujetaron, se escucho un disparo y la gema de Yuri que se encontraba en su cuello se rompió dándole fin a su vida

– . . . Hiragi-san?

Yuzu sostenía su arco mientras lloraba al darse cuenta de la verdad

– las gemas del alma dan vida a otras maldiciones . . . Entonces sólo nos resta morir  ¡tu. . . Y yo!

– ¡detente ! – grito yuya tratando de detenerla 

Una flecha azul salió disparada y golpeo la gema de Yuzu, esta cayo muerta en el suelo

– no quiero esto . . . ¡ no quiero soportar esto! – grito Yuto 

Yuya se acercó lentamente a el intentado reconfortarlo

–  todo esta bien, continuaremos los dos solos . . . Venceremos a noche de walpurgis sólo nosotros 
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El día llego y después de la batalla ambos se encontraba tirados entre los escombros con sus gemas del alma completamente negras