Desperté.
Desperté, deseando que todo hubiese sido solo un sueño, pero no fue así.
Aun estaba metido en este lugar.
Aun sentía su toque en mi piel.
Aun recordaba todas esas veces en las que me susurraba al oído que me amaba.
Y aun recordaba, el día en el que se había marchado, sin ninguna explicación, dejándome solo.