¿De qué te ríes, baboso?

54 0 0
                                    

-Max continúa-   No entiendo a Alley, no se da cuenta de que estoy aquí, que para mí es hermosa... Sus ojos, sus labios, esa forma sarcástica de hablar, como hace esa leve inclinación con sus labios al hablar...- 

Espera... ¿esto es enserio?

Joder, ¿Qué se supone que haga?, No sé qué pensar, solo esta borracho.

No puedo creerlo, Max Young, se había declarado, había esperado esto desde que nos conocimos, siempre sentí cosas por él, cosas inexplicables de él, desde mi puta adolescencia.

Pero mi sonrisa tonta se esfumo al saber que él estaba borracho, malditamente borracho. Los borrachos solo dicen cosas sin sentidos ¿no es cierto?, Oh Joder Alley Pierce, no seas débil, ten orgullo, Algún día te lo dirá tal vez no sea hoy, pero si es cierto lo que el borracho de Max, está diciendo, él se acercara y te lo dirá.
Está bien Alley, mantén la calma, dije para mí misma. Decido no seguir escuchando y alejarme de ellos, me di la vuelta sobre mis talones, pero me llevé una sorpresa no muy grata, a dos centímetros de mi cara al extraño…

¿Dalyn? o era, ¿Dave? No, no, Dylan… Si eso, Dylan. Puse mis manos en su pecho para evitar estrellarme por completo contra él, y luego subí lentamente mis ojos, para encontrarme con esos ojos azules que aunque no me gustaba admitirlo eran lindos, y poseían un pequeño brillo que los hacía aún más atractivos, volví a la realidad cuando vi que movía sus labios y articulaba algunas palabras.

-Yo – pauso un poco -lo siento – dijo rascando su nuca, pero a pesar de disculparse se mantuvo muy cerca, lo que me resulto molesto, pero al mismo tiempo me daba cierta sensación de agrado.

Rodé los ojos- Ya, idiota, aléjate-Lo empujé, pero no cedió ni un milímetro, por lo que le me molesté aún más- ¿Qué diablos quieres?-Le pregunté-

El tal chico Dylan, cambio su cara a una muy rara mueca y respondió - Nada, solo admiraba tus ojos- cambio su mirada en otra dirección para verme a mis ojos yo solo rodé los estos - lo que sea.- dije pausando un poco -Sabes, los chicos como tú, son tan, egocéntricos .- dije mirándolo mal - son como un libro abierto. - se lo que quieres y no lo conseguirás.

- ¿Y qué es lo que quiero Alley?- dijo levantando una ceja dando a entender que no se alejaría tan fácilmente.

- ¿Y qué es lo que quiero Alley?- dijo levantando una ceja dando a entender que no se alejaría tan fácilmente.

- Quieres... - dije pensando- no lo sé, pueden ser muchas cosas, puedes querer derrumbarme, enamorarme, aunque lo dudo, no eres mi tipo - dije mirándolo de arriba hacia abajo.- Tal vez quieras tener sexo conmigo y dejarme, O tal vez todas estas.

- ¿Y cómo sabes eso?- Dijo mirándome -
-Así que no lo niegas, ¿eh?, clásico de idiotas como tú- Dije haciendo una mueca mostrando mi desagrado hacía el.

- No lo decía por eso, No puedes juzgar a un libro por su portada- dijo mirándome serio.

Había algo en su mirada que me decía que confiara en él, pero no lo conocía.

Solo es el idiota hermano de Max.
-Y para que veas que no miento... ¿Qué te parece si mañana salimos, y me das la oportunidad de que no soy el maldito cretino que piensas-dijo. Yo solo traté de descifrar su rostro para si lo decía en serio, pero era inescrutable, se mantenía con su cara de póquer. Lo pensé, No, jamás saldría con él, antes se congelaba el infierno. -Eso es un rotundo y jodido no-Le contesté seria, esperando cualquier gesto que lo delatará y me demostrará que estaba bromeando, pero parecía hablar en serio.

-Pero...-Se quedó pensando en que decir, eso está bien- ¿Me odias tanto así, como para ni siquiera soportar una hora conmigo?-preguntó, al parecer sorprendido por mi rechazó inmediato.

-Puse un dedo en mi mentón y Fingí estar pensando la respuesta, aunque ya la sabía de antemano-Uhm... Si.-Le contesté tan seria como hace rato-.

-¿Me odias?-Pregunto una vez más-
-Sí. -Respondí con bastante seguridad-

¿En serio me odias? -Rodé los ojos, por repetir la misma pregunta, que pretendía con eso, pensé- Sí, sí, sí, sí, sí sí. -Estaba tan enfocada en decir que si lo odiaba para que me dejará en paz, que no presté mucha atención a sus palabras-.

Hasta que lo vi sonreír y supe que me había equivocado, entonces.

Trapped in the abyss.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora