Tiempo roto

Muévete

Miércoles 28 de noviembre.

-Necesito esa baile para hoy, estas muy atrasada -escucho decir a mi maestro de baile. Estoy ensayando una coreografía de pop, es bastante rápida, con movimientos fuertes y sensuales.

Pongo la silla en la que bailo en el lugar de inicio y la canción vuelve a sonar, muevo mi cuerpo de manera que me vea exagerada, con mucho estilo.

Esta parte de la historia de mi vida se llama "muévete". Todo esto comenzó hace mas de un año y me alargue yendo a presentaciones donde las personas me ven bailar en zócalos, plazas y carnavales. Me he desenvuelto en todo tipo de géneros musicales: pop, regatonee, hip hop, ballet, hawaiano, contemporáneo, salsa, merengue, belly dance, mambo, lírico etc.

Después de que la canción acabara tome un poco de agua y esta se repitió de nuevo durante mas de una hora, mi profesor me decía mi errores y yo obedecía para perfeccionar todos mis pasos.

Cuando todo había acabado mi querida mama llego por mi y nos fuimos caminando hasta llegar a casa, estaba cansada y toda mi ropa estaba mojada en sudor.

Mi rutina de día a día era esta:
1.- Levantarme a las 9.15
2.- 9.50 Ir fuera de mi casa a la academia.
3.- Llegar a las 10.05 aproximadamente
4.- Ensayo terminado a la 11.30 y esperar a que mi mamá fuera por mi e irnos caminando hacia nuestro hogar a desayunar y hacer un poco de tarea. 5.- Arreglarme para que el taxi llegara por mi a la 1.30 para así llegar a la escuela a tiempo.
6.- Salgo de la escuela a las 9:00, entonces mis papas iban por mi a recogerme y llegaba a casa a cenar y dormir.

Como sea, en este momento estoy entrando a la escuela y tengo mis audífonos a todo volumen como de costumbre, veo a algunos amigos y los saludo con una sonrisa en la cara.

Llego a mi salon y veo a mis compañeros, digo buenas tardes y me siento en la banca, a los pocos minutos llego mi amiga Alondra y la saludo con mucha motivación, ella lo hace de la misma manera, vamos afuera y me comienza a platicar de su fin de semana.

Ella es la chica con la que mas comunicación tengo, es simpática y cotorrona, tiene una vida pesada, verán, vive con su abuelo quien es grosero con ella, su madre esta enferma y no le gusta trabajar, no tienen casa propia por lo cual vive allí, entonces ella trabaja para mantenerse a ella y su mama, suele llorar por que se quiere ir de esa casa, esta desesperada por que su familia la trata mal y entonces yo le suelo decir que mi mama la ama y que yo también y que somos hermanas, que jamas la dejare sola y que siempre contara conmigo pero aun así ¿cómo puedes tranquilizar a un pez desesperado por respirar estando fuera del agua?

Vamos a canchas , jugamos basquetbol y reimos por las técnicas de como se avienta la pelota... Nos sentimos cansadas y vamos caminando hacia el salón y me topo por las escaleras a Alejandro y tratamos de ignorarnos pero nuestras miradas topan, es incomodo y hay tensión. Les contare, el es un chico con el que salia el semestre pasado, no eramos nada oficial pero según íbamos para algo serio, tuvimos un problema, bueno mas bien yo tuve el desacuerdo por su manera fría y distante y todo se fue por el tobogán de "no hay un nosotros", después de eso llore, no por el si no por mi, por que sentí que mi error fue ilusionarme cuando las cosas no son así, después me corte el cabello para cerrar ese ciclo... AHHHH NO SE CREAN AMIGOS, no hice eso, ya pasada la tormenta ya no le quise volver a hablar con el, fue tan fácil no volver a dirigirnos la palabra, solo nos ignorarmos y esta bien supongo.

Todas las siguientes horas estuvimos en clase hasta las 7, nos encontramos aun chico que nos provee y fuimos a nuestro lugar a fumar marihuana. No les puedo mentir, la marihuana no tiene un sabor muy agradable pero te da un buen viaje, aunque a mí se suele dar ansiedad y mucha energía, créanme que no se siente bien no poder dejar de temblar como si tuvieras Parkinson, realmente no es lo mejor. Si algún colega te ofrece marihuana tienes dos opciones:
a) decirle no, gracias.
b) decirle, una no es ninguna.

No soy drogadicta pero tengo muchos amigos que si, cualquier vicio es parecido si se dan cuenta. Quiero decir que en ningún vicio, la persona tiene la fuerza de voluntad para dejar de hacer lo que le hace daño. Tal vez el mio sea el baile, es como una moneda, con dos caras.
La cara linda: "bailas precioso! Deberías de enseñarme, tienes el don, te mueves bien, que conmovedor fue tu baile"
La cara fea: "levántate y sigue! Estás muy pesada para hacer eso, tienes que cuidar tu figura, los moretones son parte del procedimiento, muévete más!"

Sin dolor no hay ganancia, la danza es algo que no puedo dejar de hacer, a veces me estresa pero me alivia, similar a un vicio ¿no?

Todos quieren tener una vida pacifica pero la mayoría de ellos no están dispuestos a pelear.