A través de mis ojos, no se tu, pero yo veo mas que una simple nena.
A través de mi sonrisa caida, me encuentro con la tuya de oreja a oreja.
Ese pelo suyo que parecen olas del mar azul, dándome brisa, sobando mis pestañas.
Dejame entrar a ese jardín y escoger la flor por ti.
Enseñártelas y describirlas si es lo que necesitas.
¿Y si hablamos de tu antiguo libro?
Mujer peligrosa, pero cariñosa.
Antiguo, pero, y el tiempo?
El tiempo para usted ya no existe después de tantas palabras.
Las palabras son la barrera de tu jardín.
Dejaste entrar personas que recogerán flores por ti.
Pero el te las pisoteó.
Sin embargo, tu las recogiste, y las volviste a sembrar.
Recoge tus cosa y largate.
Largate de ese templo, llévate lo que necesitas, menos a el.
Cojones tienes créeme. No seas pendeja.
Muy dentro de ti esta la dueña de ese templo, una poeta sin obstáculos.
Mira que la vida amorosa esta llena de fantasias rencorosas.
Mira que la mujer, con pechos sabrosos, suelta ese aroma tropical.
Ante tantos llantos en el piso de la bañera, el agua corre por sus venas.
Aun así te levantas, tu cuerpo esta caliente, como cuando el te dijo que lo eras.
Pero realmente no lo es, prefieres el agua que a el.
Deja que ella te lleve, y te ahogue.
Es mejor morir ahogado, que exprimido por sudor pendejo.
Amor mio, te protejo con una manta alrededor de tu esplendor solar.
Te llevaré en las fotos tomadas desde antes de primavera.
Los pelos pintados de vida, la que tu y yo compartimos desgraciadamente.
Palabras sin sentido, pero que solo un templo como el de usted entiende.
Eres como esas palabras o frases difícil de explicar...
Como una simple inexplicable mujer.
Soltando todas esas curvas dichosas que tienen más potencial que el centro de cada ser armado por balas mal gastadas, pero tu no, tu puedes tener todas esas armas, y conquistar cualquier mundo, tierra que sera de usted, y de nadie mas.
