La lucha de un angel caido

Una chica preciosa

Se escuchan unos pasos rápidos y cortos que de dirigen hacia nosotros. E escuchado voces linda del cielo pero en este caso me gusto mas esta melodía que cualquier otra. Poco a poco se veían unos pies y luego una piernas bajando las escaleras. También se veían una falda roja de un hermoso vestido rojo fuerte.

-padre?- dijo nuevamente.

-no es nada Alix- respondió Morga. al fin sabia el nombre de esa señorita.

La chica bajo completamente mostrando su ser.

-HERMOSA!!- grite en mi mente rompiendo mis cuerdas bocales imaginarias. no sabría describir su belleza, pero es más hermosa que cualquier Ángel.

-quien es nuestro invitado?- pregunto con cariño al verme con sus majestuosos ojos color esmeralda

-me llamo Marco- dije tartamudeando y con la mirada fija en ella como si fuera un loco o un idiota, pero tome aire y lo dije de una manera educada. ella sonrió un poco y se dirijo a otro cuarto. cuando me concentre y mire a Morgan, pude notar una cara de impaciente, protector y firme lo que me hizo responder su pregunta.

-escape de un mercenario esclavista y al respecto del perro.....- como le iba a decir que era un Ángel? me creerá loco y me echara de la casa. tenia que inventar algo para que no me crea mentiroso.

-Y bien?- insistió Morgan mientras tomaba un poco de su Té.

-puede que me allá confundido con otra persona..... en la oscuridad no se distinguen bien los rostros- respondí nervioso, tímido y asustado por miedo a que no me valla a creer. Me miro un poco extrañado pero al final me creyó, no dijo nada pero me di cuenta por que tomo mas té o eso creo creer yo.

-Es muy tarde Marco, ¿tienes donde dormir?- me pregunto. niego con la cabeza. al ver que no tenia hospedaje se paro y me guio asta una habitación vacía y media sucia. morgan me dijo que: lo perdonara por el estado en que estaba el cuarto, pero que serviría para pasar la noche caliente. Cuando el se fue me recosté suavemente en la cama, y me quede pensando todo lo que acaba de pasar hoy.

-hoy fue un mal día, pero mañana sera mejor- me dije antes de caer en los brazos del sueño.