Por ti

Estoy aquí, de nuevo... lamentándome por todo lo que he hecho. Lamentándome por dejarte ir. Tal vez estar juntos sea mejor para los dos, pero no sé que es lo que me impide ir tras de ti. No eres perfecto, sé que tampoco lo soy y sin embargo tú me aceptas como soy... no te merezco. Te echo de menos, casi dos años desde que todo se ha complicado, y pensar que todo ese tiempo se ha desperdiciado. Todo pasa por algo, y quedamos en manos del destino, quizá debamos estar juntos, no ahora, pero si no, ¿cuando?
Soy bastante egoísta, solo quiero que me quieras a mi, porque joder, tu forma de querer enamora, y odiaría verte así con otra chica. Hoy estoy aquí, otra vez... recordándote, pensando en lo mucho que te quiero.
En la escuela podré fingir que no me importas ni un poco, pero ni te imaginas. Ja ja, si supieras que te busco en los pasillos, en el descanso... y si no te veo en tu lugar habitual sabré dónde estarás, justo en frente del anterior. Si supieras que cuando te veo desvío la mirada para verme -interesante-. Si supieras que en el baño me pasó minutos tratando de lucir bien... para ti. Para colmo con el tiempo mis mejores amigas se hicieron las tuyas, que tortura ya te imaginarás, aveces hablan de ti, de lo genial que eres... ¿que hago yo? Finjo indiferencia. Error error error.
En ocasiones hablo de ti con una amiga, de lo mucho que te extraño. Ella me dice que te hable, que lo intentemos de nuevo, que me deje de estupideces, que valla por ti, pero no puedo, no puedo herirte más.
Un día me dijiste que se acercaba tú cumpleaños y te pregunté sobre qué querías de regalo, me contestaste que querías un abrazo mío. Acepté. Aquel día llegó, pero tú y yo no hablábamos más. Desde ese día, por las noches imagino mil escenas en las que nos abrazamos, así, sin morbo... tan necesitados uno del otro. Ahora solo espero la ocasión, tal vez sea cuando sepa que no te veré más, pero por lo mientras cuídate.

               Con amor, la chica de los ojos cafés.