capitulo 4

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Ya habían pasado dos días desde que Arnold y sus amigos me encerraron en la casa a las afueras y todavía no se lo había contado a nadie . Ni lo pensaba hacer. Cuando llegué a casa mi padre me regaño, y eso que el no me había visto en todo el día . Lo primero que me dijo fue :

_ !¿pero se puede saber donde estabas?¡ es que no  piensas ......_ y siguió y siguió hasta que mi madre le dijo que parara . Mi padre dijo que se había enfadado tanto porque era una imprudencia volver a casa solo a punto del toque de queda además con los soldados que se estaban llevando a muchas familias judías me podían haber visto y pararme , entonces todo habría acabado  para mí . Yo ni lo pensé y mi padre lo sabia . Me mandó a la cama sin cenar . No sé si era porque me castigo o porque no había suficiente comida . Hacia tan solo un día que despidieron a papa y comíamos de lo que nos proporcionaba la gente .

Llegó el lunes y como siempre fui caminando esquivando las miradas de todo aquel que se paraba para observarme y cuchichear con los demás

_ este es el hijo de Niklaus (mi padre)

_ pobre chico dicen que han despedido a su padre y que ya no tienen que comer .....

y cosas como esas .

Yo no hacia caso a eso y seguía caminando hasta llegar a la casa de Kai que me esperaba a poyado en la pared de su porche . Ese día tenia más interés en encontrarme con él, tal vez me podría decir algo sobre las reuniones de su padre .

_ hola Jules _ me saludo el alegremente mientras bajaba al trote los tres escalones del porche .

_ hola Kai _ le dije con una sonrisa cómplice . Él me entendió y se puso serio , algo impensable en él _ aquí no Jules vamos de camino y ya te contaré .

_ esta bien – respondí fastidiado . Y empezamos la larga caminata hasta el colegio .

Esa mañana hacia especial frío y estaba nublado . Los arboles sin hojas se mecían de un lado al otro , y los niños que pasaban a su alrededor corriendo parecían locomotoras que en vez de expulsar humo producían un halo de vapor .

_ no he conseguido gran cosa si es lo que quieres saber . Mi madre ahora esta muy encima de mi y mi padre cada día esta mas malhumorado . Lo único que le he podido sacar a sido que esta muy fastidiado con lo que están haciendo con los judíos y que la gente que va efectivamente no vuelven a salir . cambian sus nombres por números  y los trasladan de unos sitios a otros . Dicen que no importa la edad , pueden estar haciendo el mismo trabajo un niño de 4 años y un hombre de 75 .

_ ¡vaya! _ me quedé de piedra . Muchas de las casas de mis vecinos y de alrededor se habían quedado vacías . Bien porque se habían marchado por su cuenta o por obligación . No quería acabar en ese lugar . No lo entendía no había hecho nada malo y aun así las personas de la calle me miraban como si hubiese matado a alguien . Eso mismo le dije a mi amigo.

_ siento que tengas...Que tengáis _ rectifico _ que pasar por esto pero Jules no estas solo te lo prometo . No dejare que se te lleven convenceré  a mi padre si hace falta .

Sentí en su voz decisión y no quise arrebatarle la idea de que podría estar a salvo solo porque su padre hablara con unos cuantos militares . Kai si que era un verdadero amigo pero yo en ese momento no me di cuenta de que a él también le estaba atormentando algo y no era el examen de lengua que teníamos ese mismo día. Cuando lo supe ya era demasiado tarde y me sentí como un completo idiota por dejar que Kai cargara con mis problemas y con el suyo .

Cuando llegamos a clase Arnold me esperaba en mi pupitre que estaba junto al de Kai .

_ eh Jules pasaste buena noche en tu chabola ? _ me preguntó riéndose y codeado como siempre de sus dos amigotes .

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⏰ Última actualización: Jul 06, 2017 ⏰

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Autor desconocidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora