El Jefe De Mi Vida

Capitulo 12

Capitulo 12

Gema

Me pase un muy buen fin de semana en la compañía de Marc, un fin de semana en el campo lejos de todo y todos, pero ya era el momento de volver a la realidad, el momento de enfrentarnos a la realidad.

Pero hoy era el día de hablar con la organizadora de bodas, esta mañana desayunamos juntos antes de el irse a trabajar. Debo admitir que a una persona que le gusta trabajar, es muy difícil estar todo el día en casa pero que podría decir, Marc estaba negado a dejarme trabajar en su empresa el decía que si yo tenia todo lo que quería.

Aunque estaba decidida a buscar otro empleo necesito pagar la hipoteca necesitaba ir al banco a hacer el pago de este mes, lamentablemente no tenia la cantidad completa y no podía pedir ayuda a mi hermano, ni a mi hermana y sin un trabajo no sabia que hacer solo tenia una salida y no era la que mas me gustaba era la de hablar con Marc, es enserio cuando digo que no quiero nada de su dinero pero necesito su ayuda

Mire el reloj note que era la hora de reunirme con Marc para ir al almuerzo con la organizadora deje el libro en la mesa del cual ahora que me fijo solo he leído la misma línea por mas de cuarenta y cinco minutos.

Tomo el teléfono llamo a la compañía de taxi para que me manden uno, la operadora dice que en quince minutos llega uno. Cuando aparece el taxi entro a este te indico la dirección de la oficina de Marc, le pago y camino hasta el edificio hago el recorrido habitual de cada vez que vengo en el camino me encuentro con algunos amigos los saludos y continuo mi camino entre en el ascensor pulse el ultimo botón, subí y aguarde hasta que llego a su destino.

Cuando entre al lobby de la oficina la nueva secretaria de Marc se puso de pie como si fuese un resorte, me acerque a ella, y le dije:

-Buenos días señorita Díaz, en que la puedo ayudar- me dijo con un toque de timidez

-Buenos, quiero saber si Marc esta y si puedo pasar- le regale una sonrisa

-Si, si pase hacia delante- camine hasta la puerta del despacho de Marc, toque suavemente la puerta hasta que el me pidió que entre al despacho, el estaba con la cabeza hacia abajo

-Señorita Pascuareli espero que sea rápido lo que me dirá por que no tengo tiempo- dijo con la cabeza dentro de sus papeles.

-No seré Pascuareli pero si no me quieres aquí me voy, y si quieres me voy sola donde la organizadora de boda- dije con un tono burlón y una pizcada de sarcasmo.

El lentamente levantó la cabeza como si no creyera lo que ve, pero el fijarse en que si era yo y no su imaginación en su rostro se formo esa sonrisa que tanto amo, el se levanto de la mesa, la rodeo y llego hasta mi posando sus fuertes manos en mis caderas y atrayéndome a el hasta posar los labios sobres los míos dándome un castro beso, el retiro sus labios me sonrió y dijo:

-No Gema, no quiero que te vallas, pero si quiero ir a ese almuerzo contigo, que vallamos juntos-dijo señalándonos-... aaa tú me entiendes- solté una risita

-Claro y si no tienes nada mejor que hacer vallamos al restaurante o llegaremos tarde- en forma de reprimenda con una sonrisa en mi rostro.

El me soltó camino hasta su escritorio tomo su teléfono el estiro el brazo hasta su chaqueta, el dio una vuelta el empezó a colocarse la chaqueta de nuevo me acerque a el y le ayude a acomodarse el saco y reacomode la orate de dedique una sonrisa, el me tomo de la mano caminamos hasta la puerta de la oficina, salimos por el corredor tomamos el ascensor hasta el parqueo, el como todo un caballero me abre la puerta, entro el cierra la puerta y rodea el auto entra y nos ponemos en marcha para salir hacia el restaurante.

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Cuando entramos al restaurante del hotel notamos que la organizadora todavía no había llegado tomamos asiento empezamos a hablar de temas triviales Marc dice:

-Amor dame un momento permíteme ir al baño vuelvo en seguida

-No hay problemas- el se levanta de la silla camino al baño, en lo que el se aleja entra en mi campo de visión una mujer como de unos 28 30 esbelta, el pelo largo y de color castaño, me pongo de pie, la saludo

-Gema cierto? Pregunta con un poco de duda

-La misma que viste y calza- digo sonriendo, ella suelta una carcajada le brindo un asiento

-Y su prometido no viene? -Pregunta con curiosidad

-Si, el vino solo que esta en el baño el vuelve en breve- le hago saber, ella asiente con la cabeza y toma la palabra de nuevo- te traje algunos lugares don puede ser tu boda dependiendo de lo que quieras pero quiero saber tus gustos, como quisieras que fuera ese día especial cuantas damas de honor hay, que quieres de comida, que tiempo hay, como quieres que sea tu bizcocho y lo mas importante cuantos invitados hay

Me quede estupefacta con todas las preguntas que me hizo aquella mujer en poco tiempo.

Sentí que unas fuertes manos se posaban en mis hombros- supe que era Marc por el olor a su perfume- haciendo que la organizadora se detuviera de golpe poniendo su vista fija en Marc, noto que ellos tienen en batalla de miradas y ya me sentía incomoda así que tome el control del ambiente antes de que pasara algo de lo que me tenga que arrepentir, pero antes de poder ni siguiera articular palabra alguna Marc se me adelanta y habla

-Estefanny que haces aquí?- pregunto Marc, haciendo notar que habia un deje de odio en sus palabras. Me sorprendí tanto por esa actitud de él la cual era muy extraña

-Bueno la señorita aquí y su prometido han solicitado mis servicios de organizadora de bodas ya que organicé la mía y no me pude casar note que era muy buena y me dedico a esto y me olvide de los negocios- dijo con una mezcla de orgullo, tristeza y enojo

-Si Estefanny, él es mi prometido Marc pero por lo que noto ustedes ya se conocen – hablo atrayendo sus miradas y toda su atención Mac tomo asiento a mi lado, entrelazando su mano con la mía colocándola sobre la mesa lo cual a mí se hizo extraño ese gesto de marcar territorio como si él fuera un perro

-Si ya nos conocíamos ella fue mi prometida hasta en día que la encontré con un socio enredada en sus sabanas – dice Marc remarcando cada palabra con odio

-Sabes que estaba tomada- grito ella fuera de control llamando la atención de todo el restaurante

-A mí no me interesa si estas tomada si o no solo sé que ten vi enredada en sus sabanas, crees que creeré lo que me dices?, no, entonces seamos profesionales.

-Marc compórtate si-gruñí en forma de reproche no podía creer lo que estaba pasando estaba anonadada con ese comportamiento era muy extraño de parte de él, quería que esta guerra de reproches acabara pronto, todavía habia algo como que no concordaba su en lo cual no habia pensado ella era su prometida.