Primera parte

19 1 0
                                    

Las palabras salen por si solas, plasmadas en este cuaderno húmedo por mi estupido llanto incontrolable pero hablemos de aquella vez en la que me enamoré de ti...
Recuerdo que me habían invitado a una cena por mis 19 años y por mi graduación de abogada en una universidad muy cara que en ese entonces mis padres me pagaban y en parte cooperaba con mi sueldo de medio tiempo de vendedora en la tienda de ropa ostentosa y conocida mundialmente,de nombre "Zara". En esa cena anuncie mi independencia a un departamento cerca de donde vivían mis padres no en el viejo departamento de Nueva york donde estoy ahora víctima del frío y para serte honesta "acampanada libreta" estoy trabajando de recepcionista en el periódico informativo New york times, la paga no es demasiada pero no me quejo y pronto te contaré el porque viaje desde México a Estados Unidos donde en lo único que coinciden ambos países es en tener un presidente incompetente con nombre de un pato y apellido de trompeta (jaja), me desvíe completamente del tema pero esa noche sólo fue risas, felicitaciones y gozo. Salí en la madrugada, mis padres se fueron antes y les mentí diciéndoles que me llevarían en la madrugada, quería caminar saboreando la victoria de mis metas y pensando en lo que sucedería si llegara el amor, una luna preciosa y grande estaba frente a mi presumiendo su belleza, me quede unos segundos admirándola, veo unas tres estrellas fugaces pasar juntas, augurio de suerte, cierro mis ojos apretando mis párpados y cruzando los dedos pido tres deseos...
Camino sonriendo,quito mis tacones altos e incómodos y me decido a caminar descalza por la colonia Condesa y la ciudad me guía con sus luces pero de pronto oigo un grito ensordecedor volteo y hubiera deseado no hacerlo ya que golpeaban fuertemente a un chico y una joven era subida súbitamente a un auto color plateado, las placas se me quedaron grabadas, me oculte detrás de un teléfono público, sentía temor de ser descubierta y sucedió como una película... Me acerqué ya que se habían marchado y lo vi ahí tirado sin fuerzas, sangrando de la nariz con la cara hinchada, con hematomas, me agache brindándole ayuda y el solo lloraba.
Llamé a mis padres y a una ambulancia, la patrulla llegó primero y me culpo de lo sucedido porque estaba manchada de ese liquido rojizo que se deslizaba entre mis dedos y todo fue por darle la mano, tratando de limpiarlo., me quitaron mi bolso, estaban apunto de arrestarme y el susurro -Ella me salvo- y yo me desmayé....

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 29, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Soledad LluviosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora