*Narra Joker*
Ya habia pasado una semana, el gran dia habia llegado, todo estaba friamente calculado y ahora yo por fin mataria a Batman y me proclamaria oficialmente como el amo y señor de todo Gotham, me habia vestido con mi traje de gala ya que esta era una ocasion muy especial
Harley y yo estamos en mi lamborghini purpura directo a la alcaldia de la ciudad, eramos seguidos por muchos de mis hombres, teniamos planeado secuestrar todo el edificio, asi llamariamos la atencion de Batman
*Narradora*
Jared estaba en su habitacion, estaba caminando de un lado a otro, estaba sumamente preocupado
-Mierda, mierda, mierda, mierda - No dejaba de repetirse lo mismo una y otra vez el no podia permitir que su padre asesinara al padre de su novia, a el no le agradaba mucho pero no queria ver sufrir a su chica, el abre uno de sus cajones y busca entre su ropa, encuentra lo que estaba buscando, una caja de cigarrillos
Saco uno y se lo llevo a la boca, asi se tranquilizo un poco ya que hace mucho que no lo hacia, el habia jurado no volve a hacerlo pero le fue imposible.
-¡Jared! - Dice Margot entrando a la habitacion agitada - Tenemos que irnos ¡Ahora! - Jared tira su cigarrillo que aun esta encendido y sale tras su hermana
Se montan en la motocicleta sin siquiera ponerse los cascos y emprenden camino
-¿Ahora que pasa? - Dice Jared quien esta sentado detras de Margot
-Tenemos que...estar con ellos - Die Margot acelerando - Vi los planes de papa, te aseguro que no fallara...el lo matara
-Carajo...
*Narra Harley*
Llegamos a la alcaldia y empezamos el caos, los hombres de mi pastelito y comenzaron a matar a todos los empleados, subimos hasta la oficina del alcalde y alli afuera estaba su secretaria
-D-Dios mio...- Dice la chica comenzando a rezar
-Oh cariño, eso no te salvara - Me abalanze sobre ella y comenze a golpearla, ella solo rogaba por piedad pero yo no le hacia caso
-Harley, ya vamos -Dice mi pastelito señalando la puerta de la oficina del alcalde
-Bien - Dije volteandolo a ver
Luego solo le estrello la cabeza a la chica contra el suelo, ella deja de respirar
Entramos a la oficina donde esta el alcade sentado tras su escritorio y este salta del susto que le da al vernos
-Buenas tardes señor alcalde - Dice mi pastelito apoyandose en su baston - Perdone que vengamos sin una cita previa.