El Caso Nueva York

Daniel McPherson

Ahí se hallaba en el tren de la medianoche hacia "la gran manzana" el investigador privado Daniel McPherson, yendo a sus propias vacaciones libres de cualquier caso o problema de la ciudad de Georgia. En la sección de primera clase el señor McPherson iba pensando en su inversión previa al viaje, centrada en la membresía de un club para los gentlemen la localidad. Fue entonces cuando el maquinista avisa el arribe a la ciudad de Nueva York y lo distrajo totalmente del pensamiento.

Los pasajeros abandonaban el andén de la estación, cuando el señor McPherson buscaba a su amigo el Dr. Souza, un viejo colega de la universidad de medicina en Nueva Orleans. Al no encontrar al Dr. Souza, McPherson decidió irse por su propia cuenta a su hotel.

El Sr. McPherson pidió un taxi.

- Buenas Noches, a Times Square por favor.

- Buenas Noches caballero, adelante, súbase.

- ¿Qué noticias hay de la ciudad, caballero?, Pregunta McPherson.

- Señor si usted supiera, las bandas cada vez más se apoderan de esta ciudad, se comenten homicidios, robos a mano armada, etc. La banda más rencorosa y vengativa es la de "El Profesor Campbell".

- ¿El Profesor Campbell, el que acaba de ser arrestado en Georgia?

- Ese mismo, hace unos días se escapó, ya estamos cerca son $9.95.

Después de pagarle al taxista el señor McPherson se detiene a observar el hotel Astor e inmediatamente ingresa.

- Buenas Noches, reservación para McPherson. Le dice al administrador.

- Buenas Noches Mr. McPherson, la habitación 240, segundo piso mano izquierda.

- Muchas gracias.

Al entrar a la habitación el señor nota que la suite era formidable pero no tanto como su círculo lo había definido. Una gran entrevista para una membresía codiciada por muchos hombres lo aguardaba mañana, por eso decidió descansar.

A la mañana siguiente ya vestido elegante con un saco negro, una corbata celeste y unos buenos zapatos recién lustrados, se encaminaba al Café Smith's a su entrevista.

Ya llegando a su mesa ordeno café suizo y unos huevos revueltos.

- ¿Es usted Daniel McPherson?

- Él mismo, ¿con quién tengo el gusto?

- Scott Kirkman, asesor de admisiones del club East Pines.

- Buen día. Se estrechan las manos.

- Tengo entendido que usted quiere aplicar para una membresía del club East Pines, ¿estoy en lo correcto?

- Si, Señor Kirkman.

Después de una serie de complejas preguntas, el Señor Kirkman se acerca y susurra:

- Se supone que no debería decirle nada, pero espere buenas noticias del club.

- Bueno, muchas gracias, y que tenga un buen día.

Sabiendo esto McPherson no podía esperar a contárselo al Dr. Souza por eso fue a visitar a su apartamento en la avenida Broadway. McPherson pidió un taxi.

- A la avenida Broadway.

- Vamos. Respondió el taxista.

- ¿Desea leer el Times gentilhombre? Pregunta el taxista.

- ¿Por qué no? Responde McPherson.

Al leer el times pudo ver un artículo que sobresalía del papel:

"Campbell suelto, Nueva York, toca fondo"

Gracias al reciente escape del mafioso Colin Campbell, la ciudad de Nueva York está sumida en un caos, no fue sino por el investigador privado Daniel McPherson que ayudo al arresto de Campbell en Georgia...

Ya eran dos nuevos temas de conversación que tenía que tratar Daniel McPherson con el Dr. Souza.

Mientras iba llegando, pensaba acerca del Dr. Souza: Un hombre tan puntual y honrado, como pudo plantarme en la estación de trenes la noche anterior. Algo no encajaba...

Cuando golpeo la puerta, noto que esta estaba abierta y al entrar a la concina, noto el cadáver del Dr. Nicholas Souza en el suelo junto a un Times ensangrentado y un cuchillo de cocina.