Todo estara bien

7 0 0
                                    

Baje la ventanilla de mi hermana para despedirme, Fabian se acerco con mi mama -Cuida a esta prinsecita- dijo Fabian jalandole un cachete a mi hermana... Me extrañe por esa accion - Si claro yo la cuido... Adios ma- dije eso y acelere mientra subia un poco la ventanilla, mi hermana empezo a llorar, la mire desconsolado -¿Que te pasa? ¿No estas feliz de que te halla sacado de ese lugar?- lo dije muentras aparcaba el carro en un costado de la calle

- claro que me alegra... Pero es que... No puedo ocultarlo mas- dijo callendo en llanto otra vez
- ¿Ocultar que Layla? Dime confia en mi- la abrace
- Ese maldito, estaba en mi alchoba, mi mama salio a hacer las compras semanales... El entro, coloco seguro a la puerta... Yo... Estaba asustada... Me toco, y me... -
Empezo a llorar mas fuerte, estaba en shok, no me cabia en la cabeza que pudiera tocar a mi hermana, me llene de ira - ¡QUE! LAYLA POR DIOS... POR QUE NO ME DIJISTE ANTES... ¿TE HA HECHO ALGO MAS?- dije alterado, no podua creerlo todavia -No... Pero ya lo a hecho en repetidas ocaciones- dijo tratando de no llorar, la abrace mas fuerte, me sentia impotente, y a lo mejor todo fue mi culpa, por haberla dejado sola con el, por no haberme quedado en casa... Talvez hubiera sido mejor aguantar los golpes... - ¿No le has dicho a mama?- -¿crees que no le he dicho? Siempre dice que deje de inventar cosas, que el nunca haria eso- dijo muy apagada -Tranquila Layla... Todo estara bien... ¿Porque no vamos a por un helado de chocolate con vainilla y lecherita con pepitas de colores y muchisimas gomitas?- logre que sonriera a carcajadas - Eres un adicto al dulce Marco jaja... Si me sigues alimentando asi me dara diabetes- dijo terminando de limpiar las lagrimas en su rostro, encendi de nuevo el carro y me dirigi a la heladeria mas cercana... Bajamos del carro y nos sentamos en unas sillas dentro del local...

-Buenas tardes muchachos, ¿puedo tomar su orden?-
- Oh... Si claro, ¿me podrias dar un cono doble de vainilla con salsa de chocolate?-
- Claro que si, y la señorita ¿Que desea?-
- Podrias darme una copa de oreo porfavor?- (la copa de multimedia)
- Si señorita... Ya vengo con sus ordenes-

La chica se fue y mire a mi hermana con una sonrisa de medio lado

- Entonces, segun tu te voy a dar diabetes pero te pides el helado mas dulce que hay-
- Oye no me mires a asi, despues de todo en tu casa me das el almuerzo y despues nutella con masmelos o gomitas-

Nos miramos mutuamente y reimos a carcajadas, ella es tan parecida a mi papa, su cabello crespo y castaño y sus ojos verde esmeralda pero esos los saco de mi mama pero en si es mas paresida a papa, en cambio yo tengo el pelo lacio y negro de mi mama y los ojos azules de parte de papa, la gente algunas veces dicen que nos parecemos mucho y otros dicen que no...
- Aqui esta la orden muchachos, un cono doble y una copa... Perdonen la pregunta ¿ustedes son hermanos?-
- Si señorita ese enano de alla es mi hermano- sonrio levemente
- ¡Oye!.. Tu eres la enana- lo dije haciendo un puchero a lo cual los tres reimos, la verdad ella si es muy bajita para su edad mide 1.54 y yo mido 1.76
- Bueno no les interrumpo mas difruten su helado-
Comimos el helado y despues fuimos a almorzar (que desorden... Primero un helado y despues almueso (/_-) )

- Layla... Se me olvido decirte que vamos a ir a la cabaña de papa y talvez vamos a ir con Sebas y su novia-
-¡Enserio!.. Wiiiii.... Que alegria...- estaba super feliz, cuando era pequeña le encantaba ir a esa cabaña con papa
- Entonces ahora vamos a casa de Sebastian a preguntarle-
- Okip :3-

Encendi el auto y tomamos camino a casa de mi amigo, Sebastian y Layla se llevaban muy bien y su novia Valeria es la mejor amiga de mi hermanita... En cuestion de segundos estabamos en la entrada de la casa de el...

_______________________________

Pobre Layla, sufre demaciado *despues de todo es tu culpa* primero si lo se es mi culpa y segundo no te metas pandicornio *ahhy... Solo daba una opinion aburrida ¬_¬* Bueno como sea...

Se despide luka

juguemos un rato a las escondidasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora