Capítulo 2: El origen

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¿Mejor empezar por el principio no?

Cuando ya me confirmaron el papel de la serie, el director hizo una reunión con todo el elenco. Allí estaba ella, fue la primera persona en la que me fije cuando entré por la puerta.
Se veía hermosa, con un moño despeinado y una ropa que me encantaba. Quería sentarme a su lado, pero llegué el último y todos los asientos estaban ocupados, así que cogí la única silla libre que había en el pasillo y me senté al fondo.

En cuanto me senté, el director estaba diciendo las últimas palabras y la gente se estaba yendo-¿tan tarde había llegado?-Cuando vi que ella también se estaba marchando la agarré fuerte del brazo y la gire contra mí.

-¡Me espantaste!- decía mientras se reía.

- Lo siento no quería eso. ¿Karol no?

-Si obvio. Y tú eres...-Creo que se estaba haciendo la loca, ¡me tenía que conocer!

- Ruggero, encantado- En ese momento nuestras miradas se cruzaron entre ellas lentamente. Puede parecer extraño pero sentí algo en mi interior que hizo que me apartase de ella.

-Oye, he llegado tarde y no me he enterado de nada de lo que ha dicho el director. ¿Qué te parece si quedamos esta tarde y me lo cuentas todo?

- Me parece que vas demasiado rápido, ¿no te conozco de nada y ya quieres quedar conmigo? Mejor llama al director y que te lo explique el, si?

- Si claro, perdón-En ese momento me sentí tan mal que salí corriendo de aquel lugar.

Cuando llegué a casa me puse a pensar en todo lo que paso ese día. Conocí a Karol, una chica simpática pero que por ser demasiado directo creo que no le caigo bien. Lo estropee todo.

Me puse a preparar la cena y sentí que me vibraba el bolsillo. Como no, me llamaba Cande. Otra vez. La verdad, no tenía ganas de hablar con ella. Siempre me llama cada hora solo para saber si estoy bien, si ya he comido... cada vez la soporto menos, es demasiado controladora, pero en el fondo la quiero ,y es eso lo que me hace contestar siempre el teléfono. Estuvimos un buen rato hablando hasta que decidí cortar la llamada y dormir. Mañana iba a ser un día duro.

Me levanté con ganas de hacer muchas cosas, aunque solo pude hacer una: estudiarme el guión. En un día me tenía que aprender 5 escenas porque mañana sería el primer día de rodaje y grabaríamos muchas escenas. Se suponía que el director me mandaría el guión de madrugada, pero no lo tenía. Me puse nervioso.

Mañana tenía que grabar,¡ y yo sin guión!. Le mandé miles de correos al director y no me contestaba. Estaba perdido, sólo tenía una solución. Tenía que pedírselo a Karol.
Por suerte, las escenas eran sólo con ella, así que ella tenía que tener el mismo guión. No sabía si era buena idea después de todo lo que pasó ayer, pero no tenía otra opción, así que la llamé. No me lo cogió. Lo intente una segunda vez y esta vez tuve suerte.

-¿Hola?

- ¡Karol! Gracias a dios que me cogiste el teléfono. Soy rugge. Necesito que quedemos ahora mismo.

-¿¿Qué?? ¿Por qué??

-Es una larga historia. Tú solo tráete el guión. Te espero en el café que hace esquina con el edificio donde hicimos la reunión, ¿te acuerdas?

-Sí, pero Ruggero no entiendo nada, porqué...

-Perfecto, te espero en media hora!!

-¡¡ ESPERA, RUGGERO!!

Colgué enseguida. La verdad es que me pareció raro que ella aceptara cuando el día anterior no quería quedar conmigo. ¿Habría tenido un mal día? El caso es que yo había quedado con Karol en media hora y tenía que arreglarme, ¡Todavía estaba en pijama!

Llegué un poco antes al café, no quería llegar tarde como ayer, pero ella ya estaba allí y parecía que había dormido poco.

- ¿Eres mi salvación sabes?- Le dije para romper el hielo.

- No creo que sea para tanto. ¿Ahora me puedes explicar que hago aquí tan temprano?¡Me despertaste!- Dijo un tanto furiosa.

- jajaja lo siento Karol! El director no me mandó el guión y necesito el tuyo para aprenderme los textos- Le dije. Notaba que mientras le contaba para qué la necesitaba, su cara se iba apagando.

-Oye, ¿Te pasa algo?- Pregunté preocupado.

- No, nada...¿Empezamos ya o qué?

Ese no no convencía a nadie. Le estaba pasando algo que no me quería contar, pero solo la conocía desde ayer. No le podía pedir que me lo contara todo, pero creo que lo necesitaba saber porque sentía que la conocía de toda la vida.

-Si no me quieres decir nada lo entiendo, nos acabamos de conocer-Dije.

-Tendrás que ganarte mi confianza si quieres que te lo cuente.-Dijo ella con demasiada delicadeza.

¡¡¡Hola gente!!! Comenten que les pareció el nuevo capítulo, la semana que viene publicaré el siguiente, besos!

MM

A perfect illusionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora