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Capítulo 1
Nada es fácil en esta vida, siempre hay un obstáculo o una prueba que la vida te pone. La solución es saber enfrentarlo y seguir adelante pase lo que pase, ser fuerte y luchar por lo que quieres, por lo que amas. Mi madre me decía día con día que yo no podía amar como decía amar a mi novio Jorge, si lo amaba mucho. No entiendo porque mi madre decía que no, ella no podía saber lo que sentía. Llevaba ya 1 año y medio con Jorsh, lo amaba demasiado. Como nadie tiene idea.

—Llega temprano hoy, porfavor. — me dijo mi madre con tono cansado. Ya estaba cansada de mis llegadas tarde después de la escuela. — Necesito que estés aquí para que me ayudes —, mi madre tenía un puesto de comidas fuera de la casa.
Cuando yo tenía 4 años mi mamá se separó de mi padre porque era un mujeriego de mierda. Solía tener otras mujeres y mi mamá no le iba permitir a mi padre hacerle eso a ella. Hizo bien mi madre al dejarlo. Ella trabajó unos años y nunca nos faltó nada, a mi hermana y a mi. Hasta que mi padre desapareció y dejo de llamarnos, de darnos dinero y mi madre tuvo un accidente de auto. Quedó mal de una pierna y no puede tener un trabajo estable, entonces decidió poner un puesto de comidas, no es dinero suficiente lo que ganamos pero al menos podemos sobrevivir.

—Si mamá — puse mis ojos en blanco y agarre mi mochila —, ya me voy. — Le di un beso en la mejilla y salí de mi casa. Camine una cuadra abajo y tome el autobús que me llevaba  a la preparatoria donde estudiaba, me puse los audífonos una vez estuve arriba y los 20 minutos de camino me la pasé escuchando música.

Una vez estuve en mi aula las horas se me pasaron rápido, hasta que llegó la hora de la salida. Jorge ya me estaba esperando a fuera pues había salido primero que yo, me dirigí a donde él y lo abrace. Era unos centímetros más alto que yo, su cuerpo era grande y sus brazos fuertes ya que practicaba fútbol americano. Era perfecto. Volteó y me miró con sus hermosos ojos verdes, hermosos como él.

—Hola amor — me sonrió y beso mi frente —, ¿nos vamos?

Yo solo asentí, él se despidió de sus amigos y caminamos a su casa al llegar se metió s cambiarse y yo lo espere a  fuera.

— ¡Metete! — gritó desde adentro —, no hay nadie amor — entonces entre.
Sólo iba a su casa cuando ni había nadie, su mamá era muy sobre protectora con él. Era su hijo menor y lo tenía como su bebé, y como era su bebé no permitía que anduviera conmigo. Cuando iba a su casa y estaba su madre ella siempre me hacía caras y él lo notaba más que nadie y mejor nos íbamos a otro lugar. —Andas muy seria, ¿que tienes? — me pregunto mientras se acercaba a mi y me abrazaba por atrás. Con sus fuertes brazos apretó mi pequeño cuerpo y empezó a besar mi cuello, mi debilidad.

Yo me quité inmediatamente, sabía cómo terminaría si le seguía el juego.

—América — me habló — ¿que paso?

Me voltee y lo mire, sus ojos tenían algo de preocupación.
La noche pasada me habían llegado unos mensajes de una tipa en Facebook. No recuerdo su nombre pero recuerdo perfectamente las fotos que me había mandado, eran unas fotos de Jorge con una tipa abrazados fuera de su casa. Sabía que las fotos eran recientes por que apenas hace una semana, en su cumpleaños, yo le había regalado a él un jersey de los Yeankees y en la foto con la tipa esa traía puesta justamente mi regaló.
Toda la noche había llorado mucho, pero yo amaba mucho a Jorsh que no podía creer que fuera verdad.

—Me llegaron unas fotos — le dije y el me miró confundido, era obvio que no sabía nada de las fotos. — tu y una tipa estaban abrazados — mis ojos empezaron a cristalizarse.

— América, ¿de que fotos hablas? — al ver mis ojos el intentó acercarse para abrazarme pero me hice para atrás. — Yo no he estado con nadie, yo solo te amo a ti lo sabes. De seguro es algo pasado, sólo nos quieren separar amor no les creas —

—Traías el jersey que te regalé —

—Ahh entiendo — se rió —, amor ella es una amiga y ella estaba llorando por que su papá se iba a ir y me abrazo América, alguien aprovecho y te mando fotos. Es obvio que quieren que lo nuestro terminé porque nos amamos — dijo muy seguro.

— ¿Y porque la abrazas? — reclamé celosa.

—Ame, estaba triste por su papá. No la iba a quitar, me dio tristeza verla así. — lo miré intentando creerle y el solo me miró, se acercó y me abrazo — Yo te amo a ti. Creeme. — comenzó a besarme.
Me tomo de los muslos y me cargo llevándome a su cuarto, me recostó sobre su cama y empezó a besarme con más intensidad.

Una hora después llegue a mi casa, mi madre estaba furiosa y me miraba cansada. No le dije nada y me metí a cambiarme mi uniforme, una vez que me había cambiado salí al puesto y empecé a ayudarle.

—Recoge los platos de aquella mesa — dijo molesta.

—Perdón se me hizo un poquito tarde — se giró a verme y sólo se quedó callada. Entendí inmediatamente que no quería hablar ahorita entonces hice lo que me pidió y asi fue todo el día hasta las 7 de la noche.
Mi madre veía la televisión cuando yo salí de bañarme y me senté a su lado.

—¿Cuándo vas a entender? — me miró —, no te tengo aquí porque quiera si no porque te necesito y lo sabes. No puedo yo sola en el puesto.

—Lo siento mamá, no vuelve a pasar —

—Siempre dices eso, pero bueno — suspiro — ojalá ese muchacho nunca te haga daño. —

Iba a decir algo pero en eso llegó mi hermana de su trabajo. Saludo a mi mamá y yo preferí irme a mi habitación.
Me acosté en mi cama y mire al techo, donde tenía pegado un cartel que Jorge me había regalado cuando cumplimos 9 meses. Entonces pensé en más fotos de el abrazando a aquella tipa y las ganas de llorar volvieron, no sabía que pensar o que creer. Amaba mucho a Jorge, demasiado. Pero sentía que me estaba mintiendo, aunque me dijo muy seguro que el me amaba a mi. Mis mejillas empezaron a humedecerse, y esa noche como la anterior lloré mucho hasta quedarme dormida.

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⏰ Última actualización: Dec 20, 2016 ⏰

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