Fecha De Nacimiento.

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La vida, ¿Alguna vez en su vida se han preguntado, Qué es la vida, o cual es su objetivo?, pues yo si, pero, no le encuentro su razón de existir. Una vez mi padre dijo: "Jessie, la vida es como un juego de béisbol, lo que estamos viviendo cada día es la práctica, pero, cuando pasamos a la mejor vida, ese es el propio juego, allí no puedes cometer errores". Mi padre por primera vez se dignó a contarme algo que para mi tuviese sentido, pero, si la vida es una práctica, porque existe tantos errores, fracasos, mentiras, robos, pecados; y porque no existe la igualdad entre las personas, económica como sentimentalmente.

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Jesseila Halls o mejor conocida como Jessie, soy solo una persona que nació a sufrir, muchas personas dicen que la vida es bella pero yo no pienso que lo sea aunque quiero que todos piensen que todavía tengo esperanza de que algún día todo cambiará a bien. Dios, a veces he llegado a pensar que Dios no existe o Dios es bipolar, el solo ayuda a personas con dinero, y si no es así, ¿por qué las personas de bajos recursos no pueden comprarse una mansión o al menos una casa para llevar una vida relativamente tranquila?. Hace 4 días leí un póster en una pared del hospital abandonado de Wendtrive que decía "Las personas exitosas trabajan con el cerebro no con trabajo duro, porque si no fuera así, los albañiles se pudieran comprar ferraris y mansiones". Sólo espero todos los días de mi vida a que llegue el día en que tenga que dejar mi cuerpo putrefacto en este lugar lleno de personas maliciosas y pecadoras.

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- Jessie, Jessie -

- Ujjjjjmmm -

- Jessieeeeee -

- Aaaaauuuuu - Me pellizco en el brazo mi madre.

- ¿Dónde está el dinero que te conseguiste ayer? -

- ¿Para qué? -

- Para lo que me de la gana, sólo dame el maldito dinero -

- No te lo daré, se que lo gastarás en drogas y mí hermana y yo estamos muriendo de hambre -  Se alteró y me tomó por el cabello.

- Dame el maldito dinero o te castigaré sin salir de este pedazo de rancho - Siguió tirando de mi cabello.

- Madre, en serio, estamos muriendo de hambre y mi hermana esta enferma, tenemos que llevarla al doctor - Sus ojos se incendiaron en furia.

- Que se pudra esa pobre estúpida, ahora dame el dinero o lo vas a lamentar mucho - Me amenazó con su puño cerrado.

- No, sólo estas drogada y loca - Corrí por toda la sala pidiendo ayuda a mi padre pero el sólo me ignoraba y atendía a su televisión sin prestarle atención a su entorno y en ese proceso mi hermana sale de su "habitación" - Hermana, toma el dinero y corre - Le dije con todas mis fuerzas.

- ¿Qué?, hermana, ¿Qué hago? - Me preguntó inocente.

- Correr - Mamá se abalanzó contra ella haciendo que el cráneo de mi hermana se golpeara con una fuerza impresionante contra la pared que se encontraba detrás de ella - ¡HERMANAAAAA! - La última mirada de mi hermana fue un rayo de esperanza hacia mi, como si me hubiese dicho "Jessie, sigue adelante que mejores cosas han de venir" y sus ojos se cerraron pero jamás pensé que iba a ser su última mirada llena de vida.

- Oh, cuanto lo siento, no, no fue mi intención lastimarla - Se excusó arrodillándose en frente de mi hermana - Leyla, Leyla - Le tocaba el cuello y le daba pequeñas bofetadas para ver si reaccionaba pero no daba señales de vida.

- ¿Qué has hecho madre? - Dije secándome una lágrima que me brotó del ojo izquierdo y me arrodillé hacia mi hermana - Madre, no, tu no eres una madre, eres un monstruo - Ella sólo se limitaba a lamentarse en silencio.

- ¡Por favor, no me digas así, no fue mi intención sólo estaba desesperada -

- ¡DESESPERADA POR DROGARTE MIENTRAS MUERES LENTAMENTE Y NOS DEJAS SIN MADRE!. Pensándolo bien, ¡JAMÁS TUVIMOS MADRE Y PADRE! - Negaba con la cabeza.

- Dakota, ¡¿Qué hiciste con Leyla?! - Preguntó mi padre.

- ¡SÓLO CÁLLATE, TU NO TIENES DERECHO NI MORAL PARA RECLAMARLE ESO A ESTE MONSTRUO! - Señalé a mi madre.

- Jessie, cálmate - Dijo mi madre.

- ¡No entiendo el porque de que nací con padres inconscientes! - Caminé con densas lágrimas hacia la puerta del frente y mi padre me sostuvo - ¡Suéltame Tyson, suéltame! - Mi madre lo miró.

- Déjala ir - Noté un pequeño toque de nostalgia en la voz de mi madre.