Simples Momentos

Una mirada

Solo quería dormir como siempre, eran al rededor de las 11 de la mañana y mi mamá me levanta para ir a comprar un vestido de baño, al cuál iba a usar la mañana siguiente ya que era cumpleaños de mi amigo Martín, en realidad no sé ni porque me había invitado ya que era nueva en el colegio y muy pocas personas sabían de mi existencia, ahora sé que me invitó porque le gustaba a su mejor amigo, sentía que tenía que ir linda a la fiesta, en el grupo de chat ví una foto de un chico que me llamó la atención su nombre era Daniel. Me impresionó ya que nunca antes lo había visto en el colegio, no sabía ni cuál era su aula, ni nadie me había hablado de él, pero cuando lo ví en su foto de perfil pensé en hablarle en la fiesta.
Entre a una linda tienda, lujosa y muy femenina por decirlo así, era mi estilo mucho rosa y muchos brillos. Me atendió una dulce señora que se notaba que podía hacer que comprara toda la tienda por su amabilidad, me trajo tres vestidos de baño, uno era azul no lo escogí porque realmente me hacía ver cómo si no hubiera comido en un mes, otro era verde pero... había algo en el que no me gustaba, tal vez era el color o el diseño, simplemente no me convencía para dar una buena primera impresión y no era yo misma, por último me probé uno rosa ese decía Catalina por todos lados, aquel vestido de baño me hacía verme linda, pero cursaba el sexto grado tampoco quería que todos me miraran, daba la impresión que yo podía ser una diva creída que se quería comer a todos en la fiesta. No era la primera impresión que quería así que decidí colocarme encima una blusa para nadar y no verme de tal forma, me veía como una chica normal pero no una total perdedora y por el color del vestido de baño se podía notar mi personalidad. Mi mamá opinó lo mismo del vestido de baño y directo fuimos a la caja y lo compramos. Esa noche no podía dormir, tal vez era porque tenía miedo de lo que las personas dijeran de mi, no conocía ni a la mitad de los invitados, me probé el vestido de baño como 5 veces más y había algo que se me había olvidado... ¿Qué me iba a poner antes y después de la piscina?— me pregunté
Revise todo mi armario, cajones y gavetas. Por suerte encontré un lindo romper rosa, era perfecto e iba con la ocasión, a la hora ya había caído dormida, estaba agotada y no soñé ni pensé en nada ni nadie.
¡Catalina! —gritó mi mamá con ganas de matarme.
Ya voy—dije con una voz que apenas se escuchaba.
Pasaron al rededor de 20 minutos y yo seguía en la cama.
¡Catalina, si no te levantas ya... !
Fue lo único que escuché, pegue un brinco en la cama, me puse mis pantuflas y corrí al baño.
Después de 35 minutos aproximadamente estaba lista para ir a la fiesta aunque ya mi amiga me estuviera esperando desde hacía 1 hora.
La casa era linda, mi amigo vivía cerca del colegio donde asistíamos, así que era en una barriada donde no les faltaba nada a nadie, su madre fue muy dulce conmigo me cambié y me puse mi vestido de baño, al salir del baño estaba mi amiga esperándome con las demás niñas que habían llegado, conocía a dos, mi amiga que era como india realmente no se de donde era, Jasraj y la otra; Esmeralda. Cuando salimos a la terraza donde estaba la piscina, todos los niños que ya habían llegado junto con el cumpleañero nos tiraron globos de agua, hielo y con sus pistolas agua casi congelada, lo bueno fue que salí de última y no me había caído nada. Noté que entre esos niños estaba Carlos, el niño que gustaba de mí, pero ciertamente no me atraía ni un poco, así que decidí ni mirarlo en la fiesta, conocí a muchas personas fue muy divertido hasta que vi a ese chico que me llamó la atención el otro día con mi amiga Jasraj, no lo conocía ni él me conocía a mi, fui donde ellos con un nuevo amigo que no estaba en el colegio, se llamaba Augusto, pero tenía un apodo muy divertido. Jasraj me presentó a Daniel, era más lindo en foto que en persona, pero igual me llamó la atención, nos quedamos en la banca frente a la piscina y hablamos como si nos conociéramos desde hace mucho tiempo, hasta que vi sus ojos, no sabía en ese momento que era lo que tanto les veía, pero cuando él vió los míos, me quedé como en un trance y sentía algo que nunca había llegado a sentir, me podía quedar viéndolos por horas y no cansarme. Luego fuimos a la piscina y no paraba de estar a su lado, era lo único que quería, sin mencionar que era mucho más alta que él, pero no me importaba ya que aquel chico que solamente me sabía su nombre hizo que me sintiera diferente. Luego de esa fiesta de cumpleaños, en el carro se me notaba una sonrisa involuntaria, no sabía que me pasaba.
¿Estás bien?—preguntó mi mamá
Sí, por qué no lo estaría?—contesté
Es que te he notado muy rara, no escuchas lo que te he dicho, andas en otro mundo.
Sabía a lo que se refería mi mamá, creo que me había gustado Daniel.
Llegamos al apartamento, me cambie y bañé, me coloqué mi pijama y estaba decidida a quedarme dormida, pero no podía y no sabía porque, me quedé mirando el televisor por horas y horas, pero nada me distraía de querer pensar en él. Estaba en facebook y encontré una frase que decía: "El amor de mi vida fue inmediato, porque al verle venir hacia mí, mi corazón se encogió intentando decirme que ahí estaba lo que siempre había soñado." no sabía qué significaba pero creo que se refería a un amor a primera vista y que casualidad que ese día me sentí así como si tuviera frente a mi a la persona que siempre estaba buscando. Caí dormida sabiendo que me gustaba aquel chico Daniel.