Prologo

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TODOS RETIRENSE!! -- Es la orden que les doy gritando. Todo a mi alrededor parece un caos, hay humo cubriendo el área, veo la cara de terror en cada uno de los chicos que intentamos proteger, no saben qué hacer y no se apartan de nosotros, no es que tengan plena confianza en nosotros o en quienes somos y nuestras intenciones pero al menos entienden que están mejor con nosotros que con los otros aun en estas circunstancias.. TENIENTE! - Llamo con todas mis fuerzas y la veo acercarse a mi evitando caer en algunos de los hoyos creados por las explosiones a causa de la batalla. -Aquí estoy- Me dice ella completamente agitada, esta cansada, su pelo rubio esta sucio debido al hollín, tiene algunas hojas enredadas en él, su piel blanca está sucia, ojos azules oscuros, labios rosados y un poco gruesos, nariz pequeña y esa sonrisa que siempre da no importa que tan difícil sean las circunstancias cuando habla conmigo. - Debes tomar a los chicos y sacarlos de aquí, lleva contigo al resto del equipo para que te ayuden, los chicos son nuestra prioridad, por eso estamos aquí y no podemos continuar luchando y protegerlos al mismo tiempo. Estamos a un par de kilómetros del punto de encuentro, he transferido las coordenadas a tu x-watch, sigue la ruta y estarán a salvo dentro de poco. Envía a dos adelante, tu ve en el medio con ellos y 3 atrás. Eres la líder a partir de ahora, tu estas a cargo, confío plenamente en ti, No mires atrás y llevalos a salvo.

No voy a dejarte Sargento, eres nuestro líder y no podemos dejarte atrás mientras huimos, los otros que aun quedan están cerca y -La detengo, tomo sus manos y las pongo en mi pecho, la miro a los ojos y no tengo que decir nada para que ella lo sepa, después de todo, es una de las pocas personas que siempre han podido ver a través de mi, su mirada entristece, ahora lo sabe, estoy muy mal herido. -No, no, aún podemos hacer algo, si tan solo la buscamos, ella, ella podría sanarte y salir de acá, tú siempre has dicho que no debemos dejar ningún hombre atrás. Vamos a salir de aquí todos,me oyes!!

- Ella no está y tenemos que movernos- le respondo. - Tengo fuerzas suficientes para enfrentarme a ellos, soy yo después de todo, pero no podré pelear con todas mis fuerzas o lo que quedan de ellas mientras los protejo a todos. Tienes que confiar en mí y seguir. Es una orden Teniente.- Ella asiente, no está nada de acuerdo con la decisión pero a diferencia de mi ella nunca he tenido problemas en seguir las órdenes, ella siempre ha sido un buen soldado asi que empieza a reagrupar a los chicos. Mientras tanto yo doy la orden a los demás miembros del equipo. Se retiran y quedo sólo, si nadie más alrededor, veo cómo ellos se pierden entre el humo y la maleza. Analizo el área, calculo dentro de cuántos podrán estar los otros llegando a mi encuentro, cuántos podrían ser, se que derrotamos a la mayoría, incluyendo a varios de los más fuertes se que la amenaza no ha terminado y aún quedan otros de los que me tengo que preocupar. Planeo mi estrategia para defenderme y ganar el mayor tiempo posible para que estén a salvo, esa es mi prioridad ahora, mi vida no es tan importante como la de esos chicos. Han pasado ya unos minutos desde que se marcharon cuando escucho un ruido venir en la dirección donde ellos partieron. Me pongo en posición para atacar cuando lo escucho decir: "Soy yo, Sargento. Por favor no me ataque"

¿Qué haces aquí? Les he dado una orden. Te has atrevido a dejar a tus compañeros solos? Ellos necesitan de ti como tu necesitas de ellos. Son un equipo. Por qué los has abandonado? - Tenia que volver, no podía marcharme sin antes, sin antes hablar contigo. Tenía que decírtelo, decirte que has sido un gran líder y para mi has sido como un hermano, me has apoyado y me enseñaste tanto y si no fuera por ti, nunca habría llegado tan lejos. - Conforme habla se acerca a mi, yo sigo observando a mi alrededor, no pierdo mi concentración del campo, se que muy pronto llegarán los demás. Pero sigo atento a sus palabras. - Este no es el momento ni el lugar para algo asi. No puedes abandonar a tus compañeros por sentimentalismos. Regresa ahora mismo con los demás, van a necesitar de tu ayuda, los chicos son nuestro objetivo, sacarlos de aquí nuestra misión. Lo que tengas que decirme puede esperar- Hasta el momento todo esta tranquilo, no siento que nadie más esté cerca de nosotros, vuelvo a repetirle que obedezca y regrese al equipo pero continúa hablando. Y por eso mismo tenía que ser yo el que lo hiciera, no podría dejar esto en manos de alguien más. - De qué hablas? Pregunto un poco confundido, cuando vuelvo ver hacia él puedo ver su determinación y peligro en sus ojos pero es demasiado tarde, siento como su mano atraviesa por completo mi cuerpo, el dolor es intenso, balas me han atravesado antes pero esto es incomparable. El me rodeo con su otro brazo y me dice al oído: "Sin tan solo hubieses creído en él como yo lo hice, si tan solo hubieses tenido algo más de fe esto no hubiese pasado" - Trato de hablar pero solo sangre sale de mi boca, mi cuerpo pierde fuerzas, él saca su mano y yo caigo al suelo de rodillas. Lo miro y hay lágrimas en sus ojos pero también hay odio en ellos, me da la espalda y se retira en la misma dirección que los demás. Trato de avisar a los demás pero el dolor es demasiado para poder concentrarme y no puedo moverme.

Las heridas en mi cuerpo son graves, no consideré que éste fuera el resultado, la verdad es que esperaba de todo menos quedar en pie, aunque en pie no es realmente la expresión correcta en este momento.

Yazgo tendido en el suelo, débil, sangro por la herida que tengo a un costado la cual atraviesa mi cuerpo, mi cuerpo tiembla y hay un zumbido en mi cabeza. mi traje, el cual debía de proteger mi cuerpo, está roto, casi destruido por completo y no puedo moverme.

Mi rostro esta golpeado, mi ojo derecho esta casi en su totalidad cerrado debido a la hinchazón, mi piel que debería de ser blanca ahora está costrosa por las manchas de sangre, lodo y el hollín que han rodeado el campo donde hemos librado esta batalla.

No se si es causa de mis heridas o si tan solo es mi falta de esperanza y desánimo de ver cómo han resultado las cosas ya que me encuentro justo en aquel lugar donde todo empezó, aquella piedra en medio del río Laguna cerca de mi casa, donde solía recostarme por horas escuchando la corriente del agua fluir y mi mirada se perdía en las nubes, ese lugar que era mi refugio, mi lugar feliz, es ahí donde mi mente se refugia en este momento, éste lapso de tiempo que parece una eternidad, no siento mi cuerpo ya, no siento dolor, sólo sé que mi corazón me dice que ya todo terminó, que estoy en casa, no hay más dolor.

Puedo oler el pasto, puedo sentir la brisa del viento en mi rostro y de repente puedo escuchar su voz claramente, así es, definitivamente debo estar alucinando, han pasado meses desde que escuché su voz, desde que vi su sonrisa, desde que estuvo a mi lado y fui feliz. Ahora se que estoy agonizando pero no me importa, no tengo temor, si esa hermosa figura es la muerte quién podría tener miedo a morir. Si es así, estoy listo para partir. Ya no queda nada que hacer, ya no tengo fuerzas, ya todo está perdido.

Pero en vez de atraerme me advierte, me dice que despierte, me grita que regrese ¿Oh alma mía que no ves que ya ha llegado mi momento? ¿Que acaso no puedo descansar aquí en mi lugar favorito? ¿Acaso ya no he cumplido con mi parte? ¿No me he ganado el derecho a descansar? ¿No es éste mi final?

X-SoldiersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora