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Capítulo 1.

Harry solo tuvo su habitación por treinta y dos minutos cuando deja de ser suya.

Esta desempacando sus trajes, mamá y Gemma estaban en la cocina descargando los cubiertos, ollas y sartenes mientras hablaban con las mamás de los otros dos chicos que actualmente estaban en su piso– un de cabello oscuro y musculoso llamado Liam quien había estrechado su mano y se había presentado a sí mismo, y uncallado que usaba una chamarra de cuero masculló, "Zayn, gusto en conocerte," antes de desaparecer con un encendedor y un paquete de cigarrillos.

Las habitaciones de la residencia universitaria no estaban mal. Bueno, no eran terribles. Bueno, eran habitables. Harry había aplicado para las residencias más cool y mucho más popular alrededor del campus pero no había podido entrar –esta era su segunda opción. Había una mancha amarillenta en el techo de lo que parecía ser humedad, pero por lo menos la alfombra estaba limpia y a primera impresión el colchón no tenía extraños agujeros o deformaciones, así que estaba bien. Y además, estaba en la universidad. Universidad. Había estado soñando con este día por años y no iba a permitir que un edificio de ladrillos rojos y anticlimático lo desanimara. Este es el primer día del resto de su vida, o algo lo suficientemente apropiado e inspirador como eso.

Estaba desempacando sus parlantes cuando un chico irrumpió en su habitación, dejando caer una gigante y atascada mochila en el piso y llamó por el corredor, "¡Mamá, lo he encontrado!"

"Um...Hola," dice Harry, y el chico se voltea para encontrarse con su mirada. Su expresión es de completo desconcierto.

"¿Qué haces en mi habitación?" demanda. Harry se aclara la garganta en señal de alarma.

"Bueno, um. Es mi habitación"

"No, no lo es. Es la mía."

"No..." Harry dice frunciendo el ceño, perplejo por lo que está pasando. El chico lo mira como si estuviera dañado mentalmente –Harry está seguro de que hay una expresión parecida en su cara– antes de patear su mochila hacían un lado y dar un paso hacia adelante.

"Si, lo es. ¿Ves, aquí?" El chico busca algo en los bolsillos de sus shorts de mezclilla –Los ojos de Harry se detienen más tiempo de lo que probablemente es aceptable en sus piernas desnudas, torneadas y ligeramente peludas, pequeños tobillos pulcros que conducen hasta unos pies sin calcetines, y un par de sucios Vans. Harry se sobresalta y vuelve a la realidad cuando un trozo de papel arrugado es lanzado en su cara. Se lee Louis Tomlinson, Piso 9, Habitación 494.

"Agh," Harry dice, mirando hacia el chico –Louis, predice– y pasándole su propia hoja de papel. Harry Styles, Piso 9, Habitación 494.

Se miran el uno al otro. Después, Louis chilla, "¡Mamá! ¡Ven aquí!"

-

La sala de la secretaria está desordenada. Harry se siente un poco mal por ella.

"Estoy muy– No entiendo en lo absoluto como pudo haber pasado esto," ella dice, cuando él y Gemma y su mamá, y Louis y la mamá de Louis y todas, todas las hermanas de Louis están parados en la entrada de la oficina. La secretaria de sala– : ) Stacey, su gafete dice eso– se mueve desesperadamente por los montones de papeles que denotan que estudiante está en cada habitación, como si eso fuera a producir una respuesta mágicamente.

"Estoy extremadamente decepcionada," dice la mamá de Louis, al mismo tiempo que la sonriente Stacey se ve como si estuviera a punto de llorar. "Hemos venido desde Doncaster y nos habían dicho que Louis tendría una habitación. ¿Ahora nos está diciendo que tendremos que encontrarle una casa para que él viva ahí?"

Red Brick Heart ; Larry Donde viven las historias. Descúbrelo ahora