Realmente llegas a un momento donde empiezas a plantearte todo, desde los detalles más pequeños e insignificantes de tu mísera y patética vida, hasta aquellas cosas que pueden hacer que todo mejore o siga haciendo que el todo se venga abajo. Llegas a un punto donde ya no sabes quien eres, ni que vas a hacer, ni nada... hasta te planteas si tu mísera existencia tiene algún sentido y si lo mejor tal vez habría sido haber acabado contigo mismo como una vez lo llegaste a pensar.
Ell@s te dicen que si te esfuerzas todo llegará, que las cosas van a ir a mejor, pero por detrás te miran con desprecio y sobretodo con vergüenza, ríendose de ti día sí y día también. Aquellos seres que nunca han tenido esos pensamientos tan oscuros que se han pasado por tu cabeza... ¿Vivir realmente merece la pena? Ellos con salir y hacer el gilipollas ya lo tienen todo solucionado.
Caminas, caminas solo hacia la nada, pero tampoco consideras necesaria la compañía de esas personas que solo harían amargarte más la vida aunque por delante vayan con una máscara llena de joyas para intentar causar buena impresión, pero sabes que en verdad están desnudos, mostrando sus prejuicios. Pero por otro lado, aquella persona con la que sí quieres caminar está en una situación parecida a la tuya, tal vez no tan extrema, pero sabes que no, que no puedes ayudarla, porque tú, estúpido gilipollas estás jodidamente peor. Subnormal.Alguien aparece en tu camino, diciéndote cosas como el karma... luego abres por un momento los ojos y ves por la ventana ¿Cómo va a ser real esa mierda? Nadie es juzgado por sus malos actos y aquellos y aquellas personas bondadosas en muchas ocasiones se están hundiendo en una oscuridad tenebrosa, aterrorizados, y sin ganas de vivir. ¿Karma? No. Eso no existe.
Oh, depresión, mi querida amiga, no me abandones nunca, no hagas que mi mente empiece a adorar a falsos dioses que no me traerán ningún beneficio, deja que la tristeza corra por mis nervios y me haga ser consciente de la realidad, aléjame de esa droga llamada felicidad que solo hará que vea el mundo de una manera irracional y por lo tanto estúpida.
Haz que baile con la muerte todos los días, pero finalmente no acabe aceptando su petición final, porque no es el momento oportuno aún, ya que el sol sigue saliendo todavía todos los días... incluso cuando la densa niebla no nos lo deja ver. Está ahí.
Si las personas pueden comprar paz mediante la guerra, condenando a sus hijos hacia la muerte... ¿Por qué no voy a poder encontrar la esperanza para seguir caminando? Si la gente sigue creyendo en ciertos ideales pese a que a día de hoy no son más que una mera prostitución de lo que fueron en antaño, moldeados a gusto de una sociedad que se considera sabia pero no hacen otra cosa que una apología a la estupidez y a la censura.
Antes he dicho que no me hagas ver la felicidad... la felicidad que impera hoy en día, la felicidad que consiste en predicar falso testimonio cada mísero día de nuestra existencia, donde la gente haga el papel de falsos predicadores, intentando expandir el bien por el mundo, pero que a la hora de la verdad, ninguno reparta el pan que tienen para comer y dejen morir a sus vecinos de hambre.
Quiero aquella felicidad de cuando tenía los ojos cosidos, y es que en mi hora más oscura he encontrado la causa de mi tristeza, la hipocresía de un mundo que acabará siendo destruído y yo con él, pese a que no he hecho nada para merecerlo, y muchas personas tampoco, pero seguirán con la tontería del karma.
Nunca me abandones depresión, cuando alcance MI felicidad. No quiero olvidar lo que es caminar por las sombras a contracorriente si soy capaz de acabar esta parte de mi vida llena de penurias... pero si eso no va a ser posible... aceptaré el último baile con la muerte y deseo ser convertido en un mártir capaz de provocar un punto de inflexión y desamortizar la mentalidad del mundo.
Que las quemaduras de mi piel queden grabadas en los ojos de todos esos falsos mesías, que propugnan un conocimiento irracional, con los cuales, yo me niego a interactuar a partir de este momento. La ignorancia es la felicidad... pero en este caso la ignorancia es la sabiduría, pues esas personas solo traen manipulación.
Yo solo quiero fuerzas para ellos, y ella. El resto, puede ser dueño de mi odio a partir de este insignificante momento.