El parque

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En el parque de la universidad hay un farol, en el medio de todo para ser exactos.Esta rodeado de un suave y pintoresco pasto verde, con algunas flores blancas, y grandes arboles que dan una agradable sombra al mediodía.

Era el lugar favorito de las parejas para extender una manta y tirarse a encontrarle forma a las nubes, y demás cosas que jura que el nunca pensaría hacer.No era un idiota con mas azúcar que sangre en las venas.

Como tenia un perro salchicha, Kurama, el se había recorrido el parque de pies a cabeza (El maldito animal siempre rompía la correa y el le perseguía por todos lados).Normalmente iba a distintas horas, siempre dependiendo de su tiempo libre, pero desde hace unos meses que siempre iba a la misma hora.

Por que el lindo pelirrojo, de ojos jade, que se sentaba debajo del farol y leía orgullo y prejuicio incontables veces, lo traía loco.Y siempre estaba ahí, a la misma hora, de 13:00 hs a 14:00 hs.

Por eso el iba mas frecuentemente a ese horario, por que el enano sin cejas, con nariz respingona y cadera de ensueño lo volvía perro faldero.

El pelirrojo se llamaba Gaara, y el se llamaba Naruto Uzumaki.El sabia de la existencia del de lindos ojos, pero el no sabia de la suya.Y aunque a veces le era muy difícil dejar de lado su timidez y decir Hola, juraba por todos los santos que por ese chico elegante y de bonitas manos, lo haría.

Día Uno:

¡Hoy era el glorioso día!

Hoy hablaría con Gaara, reirían, se mirarían de forma romántica a los ojos, le pediría ir a tomar un café, y después...después..¡Dios! Gaara era un pervertido.

Pero perdido en sus poco santos pensamientos, no escucho el grito de advertencia.Y lo ultimo que vio, fue como un chico en bicicleta estaba delante de el, a centímetros de su lindo cuerpo, y pensó: "Dios...¡mis bolas!"

Vio-jodidas-estrellas-azules.

No-amarillas.

Pónganse en contexto, estaba en un parque concurrido, donde la gente o venia a comer y pasar el día, o venia a hacer ejercicio.Las bicicletas no estaba prohibidas, y uno tenia que ir con el pensamiento de tener cuidado con los ciclistas.

Pero, un pelotudo con bici y un boludo distraído solo puede significar desastre.Resulta que el ciclista lo atropello, y su rueda impacto en sus bolas tan fuerte que su descendencia saldría deforme.

El ciclista le puteo de lo lindo por abollar su bici, el le grito por no esquivarlo y dejarle múltiples moretones y raspones por todos lados, la gente se amontono a su alrededor, ninguno de los dos parecía aceptar su culpa, y casi se agarran a las piñas.

Resultado final: la policía o guardianes del parque los detuvieron, y dijeron que no los soltarían hasta calmarse.

Los echaron del parque, ¿alguien sabia que podían hacer eso? Casi había llegado a pensar que estaban de decoración.

También esperaba que el lindo pelirrojo no aya visto todo su teatro.

Día Dos:

Con los rayos del sol posados gloriosamente sobre su rostro, Naruto despertó.Hoy tenia otra oportunidad.

Con eso en mente se levanto perezosamente a darse una ducha, no querría oler mal para su primer encuentro oficial con su amor platónico.

Una cosa curiosa de el, es que cuando se duchaba empezaba a pensar cosas raras, como: ¿No es el sol un pervertido? Solo piensen que todas las mañanas posa sus rayos solares arriba de los cuerpos de las personas, ¿y como saber que ese rayito de sol no es una representancion de la parte física de tierra que seria su real trasero solar, o su monumental pito? Pero hoy no tenia tiempo para flashear de tal forma.

El chico del farol (Naruto x Gaara)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora