The Deal

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Cuentan que hace mucho tiempo un demonio encontrò una forma de jugar con el amor humano.

El creó una maldición para burlarse de las personas de buen corazón.

Cuando alguien llegaba al punto de desesperación él aparecia y les ofrecía un trato:

"Cuando hace falta algo, es a Dios a quien se lo has de pedir

pero yo he escuchado tus lamentos y estoy dispuesto a entregarte mis ojos

te darán la fuerza para luchar que has pedido en tus sollozos

ya sufrirás luego...ese es el precio de lo que acabas de pedir

¿aceptas o no?¿qué me vas a decir?"

El precio de esos ojos que eran del color de la sangre consistía en que cualquier daño causado a otra persona mientras se usaba los ojos se le devolveria al poseedor al salir del trance, sin siquiera poder desmayarse, solo sufrir hasta que el dolor parara. Por lo tanto si se llegaba a matar a alguien, la persona correría el mismo destino.

El demonio se quedó en la tierra como un observador imparcial, divirtiendose con el juego que había creado.

Menos mal que es solo una leyenda

¿verdad?

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