-Gustavo... tengo miedo-me susurro Sharon al oído, abrí lentamente los ojos diciéndole
-lo se Sharon, lo se..., pero debes ser valiente pronto se terminara-se lo trataba de decir lo mas seguro que podía pero algo en mi interior me decía que nuestra historia no tendría un final feliz.
Era un hecho que era bastante temprano como las 9:00am o 10:00am así que no podía seguir perdiendo el tiempo tratando de asimilar las cosas ya que tenia que encontrar un lugar mas seguro para que mi hermana no estuviera expuesta a ningún peligro, aunque yo sabia que no podíamos estar a salvo en un 100% , pero no era prudente quedarnos en nuestra casa , quise bajar a mi hermana pero ella seguía aferrada con sus brazos a mi cuello y no se quería soltar así que no tuve mas opción que seguir cargándola hasta que se sintiera mas tranquila, camine por varios minutos sin rumbo tratando de pensar donde nos podíamos quedar mi hermana y yo, cuando por fin se soltó Sharon y quiso que la bajara deje salir una gran bocada de aire ya que hacia mucho calor y ella pesaba bastante al cabo de un tiempo, la tome de la mano para seguir caminando, después de un rato oí la voz de Sharon con un tono muy tenue
-Gustavo tengo hambre, ¿podemos comer algo?-
-claro , vayamos a un súper mercado para tomar lo que nos haga falta, ¿esta bien?-ella solo asintió con la cabeza, aún parecía muy distante, quería preguntarle que había pasado en la habitación, ¿cuál era la razón por la que grito pero viéndola así de asustada..., no, yo no podía cometer la imprudencia de preguntarle en estos momentos mejor esperaría unos días para preguntarle.
Cuando llegamos al súper mercado le dije que podía agarrar lo que quisiera pero solo agarro unas galletas y nada más
-¿no quieres otra cosa?-
-no, gracias-
-ok, entonces vamos por unas cosas que yo necesito ¿esta bien?-
-si vamos, no quiero que me dejes sola-en esos momentos pude ver reflejada en su cara la angustia y el terror que sentía, me horrorizaba la idea de que ella pasara por lo mismo que yo, muchas preguntas pasaban por mi cabeza como por ejemplo ¿y si ella no soportaba ver a los sharquetz?¿y si ellos le quitaran la vida?
-yo nunca dejare que te hagan daño Sharon, yo te protegeré con mi vida si es preciso-cuando se lo dije la abrace fuertemente y algunas lagrimas salieron de mis ojos, ella me correspondió con otro abrazo
-no te preocupes yo se que lo harás-me lo dijo muy segura al oído, eso hizo que un escalofrió recorriera desde mi cabeza hasta los pies, me solté de su abrazo y la volví a tomar de a mano dirigiéndonos a la parte de herramientas de la tienda, ahí tome lo que necesitaría para poder reforzar la puerta de la casa donde nos fuéramos a quedar esta noche, ya que en la única alternativa que pensaba era quedarnos en la casa de una de mis amigas,su casa al parecer tenia sótano y pensé que esa seria la mejor opción ya en el sótano solo hay una entrada y si alguien quería entrar o salir esa era la única opción aunque si nos llegaban a acorralar en ese lugar seria nuestro fin pero tenia que arriesgarme por mi hermana, hora ella era todo lo que importaba.
Salimos de la tienda y nos dirigimos hacia el hogar de Ashley, como los autos no funcionan tuvimos que ir caminando, hicimos casi tres horas y media para llegar pero valió la pena ya que por fin teníamos un lugar para pasar la noche, cuando intente entrar me di cuenta que no estaba deshabitada, mi corazón empezó a latir muy rápido ya que ¿era posible que hubiera otra persona en el juego además de Sharon y de mi?, esa pregunta le daba muchas vueltas a mi cabeza una y otra vez, forceje un poco con la perilla porque quería abrir la puerta hasta que escuche una voz que provenía desde la casa, parecía que era Ashley
-¡ aléjense de mi casa malditas criaturas o se arrepentirán!-
-tranquila, soy yo, Gustavo-lo dije poniendo a Sharon detrás de mi y yo quedando entre la puerta y ella, en eso se abrió la puerta y sólo vi un arma apuntándome directo a la cabeza segundos después vi que en verdad era Ashley