•¡Navidad! ¡navidad! Escuche los gritos de mi hermano menor al día siguiente, yo estaba medio dormido así que ni siquiera me tome la molestia de levantarme ya que no pedí ningún regalo, por lo cual no esperaba nada y no me importaba si me daban un regalo o no. Mi madre y padre se acercaron hacia mi y me dieron ropa y un celular nuevo, les di las gracias y por solo un segundo, por una milésima de segundo creí que había sonreído. Mas tarde tuve que ponerme un traje, fue muy desagradable, pero tube que usarlo ya que como prometí trataría de ser amable por primera vez en mi vida y lo tengo que cumplir aunque esa idea no me agrada.