Choques |Lutteo|

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Era una noche oscura, triste a mí parecer. Desde que "salió" el sol; porque para mí no ha salido nada, el día ha estado triste. Unas nubes grises que nunca había visto en mis veintiún años de vida. El día estaba triste, así que yo también estaba triste. Que puedo decir... fue un día triste, que luego se tornó en el peor y minutos después en el día más mágico de mi vida. Todo empezó así:

Otro día más. Abrí esa cortinas florales para ver la luz del día, la cual amo ver todos los día e inspirarme; de pronto abro esas cortinas y todo sigue oscuro. Sentía que este no iba a ser un gran día, mi corazón lo siente, pero mi corazón también siente emoción. Luego de ver ese paisaje que entristece, sin ganas de salir de la cama; me cambié de ropa. Una camiseta plateada, que tiene encima una chaqueta negra,unos blue jeans y unos tenis deportivos. Algo simple para una chica simple. Tampoco tenía ganas de ir a patinar a mi lugar favorito en el mundo mundial: Jam & Roller. Sólo salí a caminar. Pase por una plaza hermosa. Se sentía el viento en mi cara, sólo faltaban mis patines para que sea el día perfecto. Caminar y caminar. Escuchar el sonido que producián mis zapatos cuando tocaban el suelo. De repente escucho un estruendo y no lo dudo un segundo y miro al cielo. Pues el cielo estaba más oscuro y el sonido provino del cielo. ¿Estar aquí o en el Jam & Roller? Definitivamente estar aquí se siente bonito y especial. Como si algo extremo vaya a pasar. Pero eso bonito se va con un mensaje de texto:

Simón ;)
En línea

Amor... bueno si te
puedo seguir llamando
así. Me siento arrepentido
pero a la vez feliz. Me
besé con Ámbar. Te engañé
con un beso, pero tú sabías
que lo nuestro ya no estaba
funcionando. Ámbar es el
amor de mi vida. Y espero
que alguna vez tú también
lo encuentres. Es decir,
terminamos. Tú sabes que
jamás deseé ser el tipo de
chico que dejaba a su novia
por mensaje de texto, pero
ahora lo estoy siendo. En
serio lo siento, pero no me
quiero engañar a mí mismo
y a ti. Te quiero. Simón.
✅✅

En seguida apagué el teléfono. No quería saber nada del mundo. Sabía que lo nuestro no estaba funcionando, pero no estaba lista para terminar mi relación de cuatro años. Cuatro años con Simón Álvarez y todo se fue a la borda con un mensaje de texto. Todo nuestro futuro que tenía planeado para nosotros se había ido a la basura. No tardé en llorar. Jamás había llorado como ahora. Sentir que tenías una vida bien planeada con alguien que apreciabas, no amabas, se fue a la deriva con un mensaje de texto. Sabía que a Simón le gustaba Ámbar desde los doce añor, porque eramos mejores amigos antes de ser pareja. También sé que Ámbar le gustaba él, pero nunca se lo decían. ¿Cómo terminamos juntos? Eso ni yo lo sé. Sólo sé que a pesar de que no lo amaba, él me sacaba una sonrisa en mis mañanas con sus mensajes. Mensajes que amaba y ahora odio. Revuelta en mis pensamientos, siento agua que cae en mí. Está empezando a llover torrencial. No importa que esté lloviendo, yo seguiré caminado aquí en esta lluvia torrencial. En esta plaza. ¿Encontraré al amor de mi vida como dijo Simón? Probablemente, no. Nadie es capar de querer a una chica como yo; él único que pudo fue Simón. Y me hizo sentie bien por primera vez. Entonces ahora que estoy sin él... ¿Me quedaré sola toda mi vida con miles de gatos? ¿Habrá alguien que logre amarme? No puedo más. No puedo más con este dolor. Empecé a correr, seguía en esta plaza, ¿Cómo a alguien se le ocurrir correr mientras que está lloviendo y el suelo está húmedo? Sólo sé que de no correr si hubiera quedado con gatos toda mi vida. Corría, corría y corría. Y no miraba nada más que el suelo. Hubo un momento en el cual corrí demasiado rápido y me resbalé. Pero no me cai. Me choque con alguien, y me logró atrapar. En un instante para mí esa lluvia acabó y salió un arcoiris. Vi a un chico bonito, simple, con unos ojos café chocolate que enamoraban y una guitarra. Lo analizaba con la mirada y él también a mí. Me sostenía ahí por unos segundos y me dijo:
.- ¿Qué hace una chica tan bonita llorando en una plaza? Está lloviendo fuerte.-me dijo él mientras él se paraba y me ayudaba a mí.-
.- Mi novio terminó conmigo por un mensaje de texto.-recuperé el conociemnto de lo que estaba haciendo. Le dije mi vida a un extraño.-Perdón. No debí decirle nada. Es un extraño.- seguía llorando
.-Claro que soy un extraño. Pero no hago daño. Además antes de conocer a una persona, aquella es un extraño.-
-En parte tenía razón. Es inteligente.- No tardó en abrazarme. Lo que hace una persona normal cuando un extraño te toca o en mi caso, te abraza; es alejarlo, golpearlo, algo así. Pero por algún motivo que desconozco le seguí el abrazo. Ni Simón abrazaba como aquel chico. En sus brazos me sentía protegida y enseguida me llegó una paz interior.
.-Ya sé.- dijo el castaño.- Esto te va a hacer sentir mejor.- llevó a la castaña hacia un banco que había ahí.- Pues esto no lo compuse hace mucho. Fue hace unos días pensando en como sería encontrar el amor verdadero. Espero que te guste.- Terminó diciendo él.-