Causas, pedagogía y ayudas en el sufrimiento.

Causas, pedagogía y ayudas en el sufrimiento.

Causas.

"Las causas de los acontecimientos siempre impresionan más que los acontecimientos mismos".

Cicerón.

Ser el "padre" de algo, no de alguien, puede ser elogiable u horroroso. Por ejemplo Karl Marx, fue el padre del comunismo y el autor intelectual de millones de muertes por causa de sus ideas. En China solamente, en el siglo pasado, en tres décadas, murieron, por la revolución marxista, 70 millones de personas, muchas más que las que murieron en la segunda guerra mundial. En la ex – unión soviética, el marxismo se cobró más de 20 millones de campesinos asesinados .Ni que decir de los santos que los bestias comunistas asesinaron o encerraron bajo tortura en las cárceles. O de Adolf Hitler el padre del nazismo, por cuyas ideas fueron asesinados 6 millones de judíos, gitanos y polacos; además el autor intelectual de la segunda guerra mundial. O el padre del genocidio de Argentina, Jorge Rafael Videla, por la cual más de 30 mil personas desaparecieron para siempre. Dios sentencio con respecto a tales bestias lo siguiente Pr 10:7b: "pero el nombre de los impíos se pudrirá". Por el otro lado tenemos a Gandhi, que venció al Imperio Británico sin derramar sangre, con su filosofía de no violencia y al gran Martin Luther King que venció el sistema de odio racial en Estados Unidos con la misma filosofía. O Florence Nightingale, que arriesgo su vida en la guerra de Crimea en el siglo 19, para curar a los heridos de la guerra y popularizo la cruz roja en el mundo. O David Livingston que dejo sus huesos en África por amor a los africanos. Dios sentencio con respecto a tales personas lo siguientes Pr 10:7ª: "La memoria del justo es bendita".

¿Quién es padre de todas las desgracias humanas? Su solo nombre me repugna, Satanás. Cuando pensamos en el pecado, la muerte y dolor que este ser horrible ha causado nos horrorizamos, por decir lo menos. Un evangelista lo llamo "el carnicero de la humanidad", su nombre se pudrirá en el infierno.

Las causas del sufrimiento.

"He descubierto en la vida que cuando no sabemos por qué estamos sufriendo, el sufrimiento es mayor".

Charles Swindoll en Job.

La causa principal no es el pecado, sino su autor, Satanás, este gobierna su reino como un déspota despiadado, sus mismos príncipes y demonios le tiene terror. Podemos ver sus obras por todas partes. John White escribe en su libro La autoridad de Cristo sobre Satanás esto: "¿Qué son entonces "las obras del diablo"? Las obras del diablo incluyen esta horrible lista: confusión, privación, incapacidad, deshonra, deserción, divorcio, enfermedad, catástrofes, condenación, pecado y muerte". No hay nadie más horrible que él. La iglesia tiene que descargar toda su ira sobre él. No podemos ser pasivos y dejarlo que nos ataque, tenemos que hacerle la guerra, porque Dios prometió en Ro 16:20: "Y el Dios de paz aplastara pronto a Satanás debajo de vuestros pies", los tuyos hermano y los míos. Acordémonos que el diablo es un vagabundo, no es un ser que tiene trabajo o sirve a Dios voluntariamente como los demás ángeles de Dios, solo vaga y el mismo lo dijo, Job 1:7: "...De recorrer la tierra y de andar por ella". ¿Para que recorre la tierra? ¿Por qué anda por ella? ¿Acaso no tiene otras cosas que hacer? Si Dios le diera permiso este planeta ya hubiera está totalmente destruido, pero Dios lo restringe, es un vago sin trabajo y el tiempo que tiene, que esta contado, solo lo usa para odiar y lastimar a Dios y su obra. El, amados, es la causa número uno de todos nuestros sufrimiento, el autor intelectual del pecado y de toda obra mala. 1 de P 5:8-9: "...Vuestro adversario, el diablo, anda al acecho como león rugiente, buscando a quien devorar. Pero resistidle firmes en la fe, sabiendo que las mismas experiencias de sufrimiento se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo". Ahí lo tenemos, dice anda, ¿para qué anda? Para hacer sufrir a los santos. Por eso mis amados, tenemos que resistirle y usar todo el poder que Dios nos da para aplastarlo. Que alegría me da el ministerio de Carlos Annacondia, como me gusta verlo aplastar con la autoridad de Dios a Satanás. Todos los cristianos tenemos experiencia de los sufrimientos que Satanás nos ha causado, y ¿se la va llevar de arriba?, no, mis amados, no lo hará, va a sufrir el también y ¿qué es lo que sufrirá? Que Dios lo aplaste bajo tus y mis pies, ¡Gloria a Dios!