Querido Grandullón.

Capítulo dos: Memories.

10 de febrero 2016.
Es domingo y hay partido de futbol americano, iré a verlo. Me he puesto unos vaqueros de mezclilla, una ramera negra y uno vans negros, me puse un poco de mousse en mi cabello y lo esponje un poco, me lo deje suelto y me puse máscara de pestañas y pinte mis labios con gloss rojo.
Mi madre me llevó al campo, hacia algo de frío y yo solo llevaba mi ramera, cuando llegue vi a lo lejos a Parcker y me aproximé a él.
-Hola cariño, pensé que no vendrías- dijo besándome los labios.
-Pues viene a verte, cariño- le sonreí.
-Te ves preciosa- me dijo sonriendo y mirándome de abajo hacia arriba.
-Gracias, cariño.-Le besé los labios.- Suerte en tu partido- agregué.
-Gracias, bonita.- besó mi frente y se fue.
Me senté en las gradas, estaba viendo como calentaban antes del partido, y de pronto él apareció era Alejandro mi grandullón, el no sabía que lo apodaba así, fantasee un rato con el, y en cuanto volví al mundo real estaba tan cerca de mi, que me sonroje un poco, se dio cuenta de que lo estaba mirando.
-Hola pequeña- me dijo sonriendo.
-Hola- dije algo nerviosa- ¿jugaras?- pregunté.
-Así es, se me hizo un poco tarde, suerte que aún no empiezan- dijo aliviado.
-Suerte en tu partido grandullón-le dije sonriendo.
-¿grandullón?- pregunto divertido por mi expresión.
-Pues si grandullón, tú me dices pequeña y yo te diré grandullón- le dije sonriendo, me sonroje un poco.
-Oh bueno- sonrió- gracias pequeña- agrego.
Era simplemente perfecto carajo, me encantaba, me gustaba tanto la forma en que se expresaba, la forma en que hablaba, incluso la forma en que hacía que todo pareciese perfecto, empezó el partido y sinceramente no entendía ni un coño, pero bueno, sólo veía que se golpeaban y aventaban una especie de trapos pequeños y cambiaban de 1 a 4 y movían una cadena, y estaba mirando como tonta a Alejandro, y Patrick me pillo un par de veces, pero bueno seguro pensó que estaba muy interesada en su partido y no me dijo nada,
Alejandro se veía tan guapo jugando, que ni siquiera me percaté que era tan obvio como lo veía, después de todo el nunca se fijaría en mí.
Terminando el partido sinceramente sólo supe que habían perdido por sus caras, me devastó tanto ver a Alejandro llorar, eso de ser el QB del equipo no estaba tan cool como pensaba era una gran responsabilidad y mucha presión, no es sólo lanzar. Tenía muchísimas ganas de abrazarle y decirte que lo había hecho bien, que para mí era el mejor jugador pero no podía hacerlo. Y entonces sentí que algo se aproximaba hacia mí y vi a Patrick tras de mí.
-Perdimos cariño- me dijo un poco decaído.
-Lo sé, pero has jugado increíble- le dije.
-No, cariño, falle mucho- me dijo agobiado.
-Tranquilo- dije- lo has dado todo en la cancha y sé que puedes dar más sólo es cuestión de esforzarte un poco más- agregué.
-Gracias por venir, linda, iré a cambiarme- me sonrió
-Espera, me despido de una vez, tengo que irme, te quiero- le sonreí
- Vale cariño, te cuidas, me avisas cuando llegues a tu casa- beso mis labios y me sonrió
- ¿qué pasa? - pregunté
-Es que extrañaba tanto que me dijeras que me querías, sólo eso mi amor, te adoro.- beso mi frente y se fue.

Después fui a casa, estaba algo confundida no sabía que pasaría si Patrick se enteraba que me gustaba de cierto modo su amigo (grandullón), aunque sabía que era una tontería porque el no correspondía, pero no quería sentir nada por él. Y por su jodidamente hermosa sonrisa y ojos preciosos y esa pequeña nariz perfecta.
Y de nuevo otra noche pensando en tanto y nada al mismo tiempo, creyendo que estabas loca y a la vez tan feliz, teniendo fantasías con sus besos, y sentir que es real por un momento. En ese momento sonó mi móvil.

Patrick- Hola cariño.
Yo- Hola mi niño.
Patrick- ¿Tienes algo que hacer mañana?
Yo- Tal vez iré al campo, a entrenar contigo.
Patrick- No sé si iré, cariño. Iré a beber con unos amigos, quería invitarte pero veo que ya tienes planes ¿entonces vienes o no?
Yo- iré al campo, nos vemos después, hasta mañana.
Patrick- está bien cariño, bonita noche. Besos.

Deje el móvil a un lado de cama, tome mi ropa de baño y me di una ducha larga, deje caer el agua unos 10 minutos más de lo normal, esperando tener un poco más claras las cosas, y empezar a rendirme y bueno quería que todo regresará a ser como siempre y estar bien con Patrick. Salí de mi ducha y me puse mi pijama, unte un poco de crema en mi cara, me hice un medio moño y me acosté en mi cama, tape mi cara con mi cobija e intente dormir, pensando en el y en nuestro pequeño "encuentro" yo era su pequeña, siempre lo sería.