Strong |Naruto| ©

16 |Relleno (?|

Ar: Antes de que comiencen a leer... Esto será como un antes.

Lyla: Tal vez se lo tomen como relleno pero..., vamos, hablamos de Naruto.

Ar: El rellenuto siempre estará presente :v

¡Disfruten su lectura!

Siete años antes.

Narra Mika.

—Mika, debes concentrar tu chakra, ¡no pierdas las concentración!—  Orochimaru me presionaba para que concentrará mi chakra en mi objetivo, uno de tres muñecos de madera que se encontraban estratégicamente colocados en distintos puntos de la habitación en donde mi tío, y maestro, me entrenaba.

—Tío... Me duelen los brazos, ya me cansé— Orochimaru me miró con enojo y decepción.

—Te he dicho que no me llames tío, recuerda que estás aquí por qué tú madre me pidió que te haga más fuerte, estás aquí por qué eres mi experimento— hizo una pausa —Vete— su tono en esa última palabra fue más seca que en las demás.

Baje la cabeza y Camine en dirección a la puerta, pero esta se abrió dejando ver a Kabuto.

— ¿Ya tienes a mi experimento?— pregunto Orochimaru a Kabuto el cual sonrió y acomodo sus lentes.

Kabuto se movió dejando ver a  una pequeña persona, un poco más alta que yo, esta persona traía una capa que no me dejaba ver su cara.

—Su nombre es Kaori y como lo pediste tiene el ojo— dijo Kabuto, la persona dejó ver su rostro, solo la mitad, ya que su cabello lo tapaba... ¡SU CABELLO ERA BLANCO!

Parecía tener mi edad tal vez un año más.

¡PERO ESTABA CANOSA!

—Mika te dije que te fueras, ¿qué haces aquí parada?— me miró todavía enojado.

Me fui de la habitación y los deje solos a los tres.

(...)

Estaba en la oficina de Orochimaru, me gustaba estar aquí es muy solitario, podía ver las cosas de él, sentarme en su sillón detrás de su escritorio y podía llorar sin que nadie me viera, al final me calmaba y salía a buscar rocas.

¿Por qué rocas? Pues porque sí.

Cuando me calme salí de allí y camine en dirección a mi habitación, llegando pude ver a Kabuto con Kaori.

—Esta es tu habitación, te buscaré a primera hora para entrenar otra vez— le dijo Kabuto y se fue, ella entró a su habitación sin decir palabra.

Yo me escabullí hasta su puerta y toque, se escucharon un "pase" y entre, ella me piro esperando que dijera algo.

—Soy Mika, solo venía a ver cómo estabas— le dije y espere a que digiera algo, pero ella solo me miró fríamente, me puse nerviosa al ver que no decía nada— ¿Q-quieres que t-te muestre el lu-gar?— le pregunte cabizbaja.

—No, ahora solo quiero dormir, déjame— su voz seca salió sin titubeos, seguido se acostó dándome la espalda.

Noté que no traía su pijama y sentí curiosidad y di un paso en su dirección.