¿Dónde está hyung?

Parte 5.-

Namjoon ha estado pensando, cuidadosa y detenidamente. Ha comenzado a creer que sus compañeros de grupo han puesto en marcha una conspiración en su contra y que todos los desafortunados incidentes que han transcurrido en los últimos días no son más que parte de ese malévolo plan creado, seguramente, por la línea maknae. No se imaginaba ni a Yoongi ni Hoseok a media noche, riendo maquiavélicamente mientras hablan de cómo arruinar su noche de recompensa con Seokjin.

Porque no había otra explicación, ¿verdad?

Aunque bien podían ser sólo estúpidos...

Lo cierto es que, quería creer que eran estúpidos y no que era un plan de sus compañeros para que no tuviese sexo. Eso sería muy cruel de su parte, sobretodo sabiendo lo quisquilloso que era Seokjin para tener sexo, a tal punto de tener una lista de necesidades que debían cumplirse antes de acceder: que hubiese mascarillas para el cutis al terminar, que no hubiese música de ambiente muy ruidosa, que la cama tuviese olores florales, que ninguno de los niños estuviese cerca, entre otros.

Él era ya un héroe por cumplir con todo eso y ahora sus compañeros...

Arggg....

Namjoon se paseó de un lado al otro mientras los miembros restantes le observaban en silencio, sin ánimos de ser asesinados por abrir la boca sin permiso. Taehyung estaba enfurruñado en un rincón, Suga había tenido que ir hasta el departamento de B1A4 y lo había arrastrado por cuatro calles del tobillo mientras Taehyung pataleaba como un niño pequeño. Hicieron falta tres golpes y un soborno, para que se callara.

Jimin, por otro lado, se mantenía quieto y jugueteando con sus manos, a la espera del regaño por lo que el desafortunado incidente de la ropa. Pero no era su culpa que el shampoo de fresas de Jungkook volviera todo de un pálido rosa y que algunas telas, evidentemente más sensibles a los químicos, sufrieran en el proceso. Tenía en la punta de la lengua el grito acusatorio: "¡Fue idea de Tae!"

Por otro lado, Hoseok sonreía. Sonreía como si fuese una mañana normal y todo estuviese bien, porque según él, era perfecto y no había cometido ningún error a lo largo de ese tiempo. Namjoon podría rebatir eso al hablar de cómo había cargado toda la comida a su tarjeta personal sin avisarle pero seguía caminando de un lado al otro sin decir nada.

.- Namjoon, tengo sueño... - habló entonces el mayor de los cinco, que permanecía tirado sobre la alfombra mientras trataba de dormitar – Tus pasos de elefante no me dejan dormir, quieres por favor...

Antes de que el líder gruñera (con respeto), el ruido de la puerta siendo abierta los distrajo a todos y el primero en saltar de su lugar y correr cual koala hacia el recién llegado fue Taehyung, que se prendió del cuello y las caderas de un Jungkook confuso todavía en la puerta. Tras él, Ken sostenía la muleta y su bolso con ropa. La sonrisa perfecta del otro vocalista le produjo a Namjoon ganas de golpear a alguien.

.- Hola a todos – saludó con su sonrisa perfecta, su ropa perfecta, su cabello perfecto, su voz perfecta, sus ojos perfectos...

.- ¡Aléjate de mi novio! – Lloriqueó Taehyung todavía prendido de Jungkook, que analizaba como tirarlo de la forma más dolorosa pero fácil al suelo – Él es mío, mío, mío...

.- No soy un juguete – rebatió el maknae mientras Ken reía tras él – Vete más bien con tu sunbaenim toca traseros ajenos...

.- ¡Eso fue a hace mucho!

.- Bueno~, Ken hyung también me tocó el trasero ayer – dijo con una sonrisa el menor, observando como el rostro de Taehyung se contraía de molestia.

Suga intervino de forma oportuna entonces y amenazándolos con la correa, se despidieron a coro de Ken. Taehyung por su lado, comenzó a lloriquearle al maknae por su perdón mientras el rapero principal hablaba de como los dos eran unos inmaduros que lo único que hacían era causarles problemas.